La Junta de Castilla y León ha mostrado su satisfacción por la condena a dos cazadores que abatieron un lobo, especie protegida a sur del Duero, durante una cacería en la localidad abulense de Tornadizos, lo que considera un “aval” de la Justicia hacia “el cumplimiento escrupuloso de la legislación medio ambiental vigente” y “la especial protección” que el Gobierno autonómico ofrece “a las especies protegidas y a toda la fauna de la Comunidad”.
A través de un comunicado, la Junta recuerda que ejerció en este proceso la acusación particular contra los dos cazadores que abatieron un lobo ibérico en el transcurso de una cacería en 2015, lo que el Juzgado número 1 de Ávila ha resuelto condenar a los autores del hecho.
El Ejecutivo regional ha ejercido la acusación particular al tratarse el animal abatido de una especie protegida, tal y como se dedujo del estudio morfológico de las pruebas recogidas en el lugar de los hechos, efectuadas por el Servicio Territorial de medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, en un caso en el que el ministerio fiscal es este caso no ejerció su acusación pública.
La sentencia señala como hechos probados que los dos acusados participaron en una montería-cacería en la finca conocida como Valdeciervos de los Arroyos, perteneciente a la localidad de Tornadizos de Ávila, entre las 12.00 y las 18.00 horas del día 29 de noviembre de 2015.
En el transcurso de dicha cacería se efectuaron varios disparos a un lobo desde el puesto 15 de la montería, ocupado por los dos acusados, y uno de los disparos produjo la muerte del lobo.
El juez condena a los dos acusados, como solicitaban los Servicios Jurídicos de la Junta de Castilla y León, por un delito contra la fauna, previsto y penado en el artículo 334.1 a) del Código Penal, a una pena de multa de ocho meses, y asimismo les impone la pena accesoria de inhabilitación especial para profesión u oficio e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de cazar por tiempo de tres años.
En relación con la responsabilidad civil, el fallo dicta que ambos acusados deberán indemnizar conjunta y solidariamente a la Junta de Castilla y León con la cantidad de 9.261 euros, cuantía en la que se tasó el ejemplar de lobo ibérico, y que se corresponde con la petición de los Servicios Jurídicos.
Además, la sentencia recoge la condena a uno de los cazadores como autor criminalmente responsable de un delito de tenencia ilícita de armas, previsto y penado en el artículo 564.1.2º del Código Penal.