LaLiga ha presentado las correspondientes denuncias por los insultos racistas en contra del jugador Vinicius Jr durante el partido entre el Real Valladolid y el Real Madrid de la pasada jornada, ante los organismos judiciales, administrativos y deportivos competentes. Al futbolista le tiraron objetos y le llamaron “mono” desde la grada.
El jugador criticó la pasividad de LaLiga hace unos días a través de sus redes sociales: “Los racistas siguen yendo a los estadios y viendo al mejor club del mundo de cerca y LaLiga sigue sin hacer nada... Seguiré con la cabeza alta y celebrando mis victorias y las del Real Madrid. Al final, la culpa es mía”, lamentó el jugador.
Finalmente el organismo ha presentado una denuncia penal por delitos de odio ante los juzgados de instrucción de Valladolid, acompañada de las pruebas audiovisuales recabadas en la investigación.
El jugador del Real Madrid recibe insultos racistas durante los partidos con frecuencia. En septiembre aficionados del Atlético de Madrid profirieron cánticos en los que le llamaban “mono” antes y durante el derbi que se disputó en el estadio Metropolitano. La Fiscalía archivó la investigación porque, pese a reconocer la existencia de los cánticos racistas, fueron proferidos por personas que no pudieron identificar.
Denuncia ante la Comisión contra la Violencia en el Deporte
Igualmente, desde LaLiga, tal y como informa a través de un comunicado recogido por Europa Press, se ha solicitado a los juzgados de instrucción de Valladolid que dé traslado de la citada denuncia a la Fiscalía de delitos de odio para su personación en esta causa.
Por otro lado, y como se viene haciendo desde hace varias temporadas, se ha presentado escrito de denuncia por insultos racistas ante el Comité de Competición de la RFEF y la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, para su estudio y valoración de sanción.
Así mismo, LaLiga anuncia que incrementará los esfuerzos que realiza de forma continua para erradicar cualquier tipo de violencia, racismo o xenofobia dentro y fuera de los estadios.
Para ello aumentará el número de oficiales de integridad de LaLiga presentes en los encuentros con riesgo de producirse insultos racistas, con el fin de extremar la detección e identificación de este tipo de conductas que no tienen cabida en el deporte.
Además, en aquellos estadios en los que se considere que exista el riesgo de posibles comportamientos racistas en las gradas, se emitirán mensajes a través de la megafonía y de los soportes publicitarios que rodean el terreno de juego para luchar y condenar el racismo.
El Real Valladolid condena los hechos
Sobre los hechos denunciados, el Real Valladolid publicó en la noche del 31 de diciembre un comunicado en que condenaba los “cualquier forma de racismo” y ha lamentado mucho lo ocurrido en los “incidentes aislados” registrados tras ser sustituido dos el jugador del Real Madrid. El club ha querido desmarcarse de unos hechos que “no representan a la inmensa mayoría de aficionados blanquivioletas” y ha remarcado el carácter “siempre respetuoso” de la hinchada.
La entidad también ha adelantado que se reserva la toma de medidas disciplinarias en caso de que haya abonados involucrados en los incidentes, además de ponerse a disposición de LaLiga para “llevar a cabo las investigaciones pertinentes”.
El Real Valladolid ha remarcado el carácter “aislado” de los incidentes y ha defendido que están decididos a “implementar más medidas que permitan concienciar, evitar y combatir cualquier episodio similar”.
Violencia cero
El objetivo de LaLiga es la violencia cero en el deporte y para ello se llevan a cabo diferentes prácticas de formación, prevención, detección y denuncia en cada jornada, que son trasladadas a la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte, así como la Fiscalia de delitos de odio.
Del mismo modo, LaLiga denuncia y se persona como acusación en cualquier procedimiento penal relacionado con hechos violentos ocurridos en el ámbito del fútbol.
LaLiga sigue trabajando con los clubes, los jugadores, las autoridades y todas las partes implicadas en el deporte para asegurarse de que en el fútbol no tengan cabida ningún tipo de conductas violentas o racistas.