La cárcel de Brieva decidirá la semana que viene si concede a Urdangarin siete días de permiso ordinario en Navidad

EUROPA PRESS

La dirección de la cárcel de Brieva (Ávila) tiene previsto resolver la semana próxima la petición que ha cursado Iñaki Urdangarin para disfrutar durante las fiestas navideñas de siete días en su primer permiso ordinario.

El marido de la Infanta Cristina lleva 17 meses en prisión y el pasado jueves cumplió una cuarta parte de su condena a cinco años y diez meses por el 'caso Nóos'. Como ocurre con cualquier otro preso clasificado en segundo grado, Urdangarin puede pedir permisos ordinarios para salir de la cárcel con un máximo de 36 días al año --18 días por semestre--, aunque sin poder sumar más de una semana de forma consecutiva.

El primer permiso se ha pedido coincidiendo con la proximidad de las fiestas navideñas y, según las citadas fuentes, lo normal es que finalmente la dirección de Brieva apruebe entre tres y seis días. Si Urdangarin estuviera en contra de la decisión de Instituciones Penitenciarias, puede recurrir ante el juez de Vigilancia Penitenciaria.

El juez ya le concedió en septiembre a Urdangarin un permiso para asistir a un hogar religioso de voluntariado en Pozuelo (Madrid), de acuerdo al artículo 117 del Régimen Penitenciario sobre “medidas regimentales para la ejecución de programas especializados para penados clasificados en segundo grado”, como es el caso de Urdangarin. Le autorizó a salir dos veces por semana y un máximo de ocho horas al día. La decisión fue respaldada por la Audiencia Provincial de Ávila al rechazar el recurso de la Fiscalía.

De esta forma, fue el 19 de septiembre cuando salió por primera vez del módulo de Brieva que eligió de forma voluntaria tras ser condenado por delitos de prevaricación continuada y malversación (ambos en concurso), tráfico de influencias, fraude a la Administración y dos delitos fiscales. El marido de la Infanta está desde entonces en un módulo en el que no hay otros presos, ya que la de Ávila es una cárcel de mujeres.

Preparación para la vida en libertad

Los permisos ordinarios a los que ahora se puede acoger el cuñado del Rey están regulados en el artículo 154 del Régimen Penitenciario. De acuerdo a la norma, se pueden conceder permisos, “previo informe preceptivo del Equipo Técnico”, para la salida ordinaria “de hasta siete días de duración como preparación para la vida en libertad”.

Estos permisos son hasta un total de 36 días para los penados clasificados en segundo grado o de hasta 48 días para los que estén en tercer grado, “siempre que hayan extinguido la cuarta parte de la condena o condenas y no observen mala conducta”.

Los límites máximos anuales de 36 y 48 días de permisos se distribuyen, según el Reglamento Penitenciario, “como regla general en los dos semestres naturales de cada año”. Para el preso clasificado en segundo grado, como es Urdangarin en la actualidad, podría disponer de hasta 18 días en total en un semestre --serían 24 días para presos en tercer grado--.

“Dentro de los indicados límites”, añade la norma, “no se computarán las salidas de fin de semana propias del régimen abierto ni las salidas programadas que se regulan en el artículo 114 de este Reglamento, ni los permisos extraordinarios”.

Antes de su ingreso en prisión en junio de 2018, la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo rebajó en cinco meses la condena al exduque de Palma, pasando de los seis años y tres meses de la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca a la condena firme de cinco años y diez meses por varios delitos relacionados con la actividad del Instituto Nóos. La Fiscalía había pedido un incremento de la pena de hasta diez años.

Una vez que ingresan en prisión, los reclusos tienen un límite temporal de dos meses para ser clasificados desde el momento en que la sentencia es notificada en los centros penitenciarios. Luego se vuelve a estudiar de forma automática la clasificación de grado cada seis meses como máximo. La última revisión de Urdangarin fue el pasado julio, permaneciendo en segundo grado. Su progresión al tercer grado, en principio, se podría plantear pasada la mitad de la condena, esto es a partir del segundo trimestre de 2021.