Vox en Castilla y León se sume en el caos: dimisiones, bajas, rencillas y más sueldo para García-Gallardo

Este sábado el Boletín Oficial de Castilla y León editaba una edición especial, no se publica este día de forma ordinaria, en que recogía el cese de Juan García-Gallardo como vicepresidente del Gobierno autonómico y de los ya exconsejeros Mariano Veganzones y Gerardo Dueñas al frente de Industria y Empleo y Agricultura y Ganadería, respectivamente. El presidente Alfonso Fernández Mañueco lo hacía, eso sí, agradeciéndoles los servicios prestados y así se pone fin al gobierno de coalición de PP y Vox, el primero autonómico en España, que ha durado dos años y tres meses.

Pero la decisión de Abascal de romper con el PP y arremeter contra Feijóo por aceptar el reparto de menores migrantes a las autonomías también ha acabado rompiendo Vox en Castilla y León, donde sus consejeros se rebelaron contra su decisión y ha acabado con la salida de ellos de la militancia y cargos internos del partido de extrema derecha. Además, la salida de Vox del Gobierno conlleva que medio centenar de cargos que tendrán que volver a sus antiguas ocupaciones o buscarse una nueva, ha cifrado el propio presidente Mañueco este sábado. Habrá que ver los ajustes de los que se quedan o se van de la consejería de Cultura, que sigue en manos del controvertido Gonzalo Santonja por “confianza personal” del jefe de gobierno. Una de las mayores urgencias del Partido Popular será encontrar un gerente para el servicio público de empleo de Castilla y León, Ecyl, uno de los cargos más inestables en los 814 días de gobierno de coalición, con tres nombres que acabaron saliendo por la puerta de atrás, durando el último apenas unos días.

Los tres consejeros de Vox se negaron a dimitir de sus cargos pero el presidente Mañueco optó por cesar a Veganzones y Dueñas por su pertenencia al partido de extrema derecha. Y eso que ambos, en desacuerdo con la decisión de Abascal, han optado por dejar de pertenecer a Vox. Mariano Veganzones ha sido además el puntal ideológico de Vox en el gobierno de Castilla y León, siempre con su pin de la 'Agenda España' y arremetiendo contra la Agenda 2030 y entablando una guerra sin cuartel con los sindicatos, a los que insultó en varias ocasiones, hasta reventar el Diálogo Social en Castilla y León. Siempre con el permiso del PP que apenas ha intervenido en la trifulca, incluso a costa de cargarse el servicio de mediación de conflictos laborales Serla. Tal era su implicación en el partido que Veganzones fue nombrado el pasado otoño presidente de Vox Valladolid, protagonizando en los últimos meses concentraciones ante las sedes del PSOE.

El ya exconsejero de Agricultura, que ha sido otro de los símbolos de la política de extrema derecha aunque sin la furia de Gallardo o Veganzones, Gerardo Dueñas, también ha dejado de ser afiliado del partido de extrema derecha y ha dimitido como vicepresidente del Comité Ejecutivo Provincial de Vox Palencia. Dueñas se ha dejado por el camino haber jaleado a los ganaderos que acabaron atacando la sede de la Junta en Salamanca para rebajar los controles ganaderos, aunque luego “lamentó” los hechos sin condena expresa, y su legado es una rebaja de los controles veterinarios con una fuerte polémica.

Gallardo vs. Pollán

“Es una decisión que no ha sido fácil, pero no por ello poco meditada”, aseguró Gallardo al anunciar su dimisión en la que hizo un alegato xenófobo para justificar la misma. La cara más conocida de Vox en Castilla y León recalará ahora en las Cortes de Castilla y León para 'liderar' la oposición al gobierno en solitario del PP. Pero como árbitro tendrá a Carlos Pollán, presidente del legislativo, y una de las figuras en alza en los últimos tiempos del partido, precisamente en detrimento de Gallardo, y con el que hay una rivalidad interna poco disimulada.

En las pasadas elecciones europeas Abascal solo hizo acto de presencia en la Comunidad en un mitin de apertura de campaña en la ciudad de León, lo que disparó las especulaciones internas por la especial relación que ahora tiene Pollán con la sede nacional de Vox y la pérdida de influencia de Gallardo. Carlos Pollán tiene un perfil educado frente al 'macarrismo' público de Gallardo, aunque sus decisiones son polémicas como convertir la Fundación Castilla y León en un chiringuito ideológico de Vox de la que la izquierda y los sindicatos se han acabado saliendo. Tanto que el PP se ha acabado montando otra fundación, dependiente de la Presidencia del Gobierno con unos cuantos fines similares.

Ahora que el espacio de poder de Vox se acota a las Cortes de Castilla y León y su grupo parlamentario está por ver como se manejan las dos principales referencias del partido. Pollán ha descartado dimitir y este sábado en declaraciones a una agencia ya sugirió que las medidas que propondría Vox en las Cortes serían de “más Agenda España y menos Agenda 2030”. Marcando el territorio aunque su labor es ser árbitro de la actividad parlamentaria, que se ha saltado en varias ocasiones como cuando amenazó al PSOE con retirar por la fuerza de su despacho la bandera LGTBI que han colgado ante la negativa de hacerlo del legislativo. Pollán disfruta además de asesores que Gallardo ya no tiene, como su jefe de gabinete, Gonzalo Altozano, que defiende a neonazis que atacan a cómicos.

La pérdida de influencia de Gallardo en Madrid se agravó tras la salida de la que fue su directora de comunicación, Montserrat Lluis, que ahora es una de las personas claves de Santiago Abascal. Lluis abandonó Valladolid tras año y medio como 'sombra' de Gallardo y a cargo de la comunicación del área de Vox en el gobierno autonómico, plagada de dimisiones y ceses como no se conocía en otras épocas.

Más sueldo para Gallardo

La salida del Gobierno para las Cortes de Castilla y León va a tener una consecuencia inesperada para Juan García-Gallardo, un considerable aumento de sueldo ya que hasta ahora como vicepresidente cobraba 80.741,24 euros, además de tener el beneficio de disfrutar de un coche para sus desplazamientos oficiales. Como portavoz de Vox en las Cortes de Castilla y León, cargo que anunció que asumirá al dimitir como vicepresidente, García-Gallardo pasa a cobrar 100.000 euros. En Vox hay tres dedicaciones exclusivas, de 13 parlamentarios más la del Presidente y la Secretaria de la Mesa, que en la actualidad cobran el portavoz y viceportavoces Carlos Menéndez, David Hierro e Ignacio Sicilia, siendo este último en principio el 'damnificado' por la llegada de Gallardo al parlamento.

El portavoz de grupo en las Cortes de Castilla y León, donde solo cobran sueldo 25 de las 81 actas de procurador autonómico, disfruta de un un sueldo equivalente al de los de la Mesa, que se compone de varias partes. 76.737,08 euros al año de sueldo base, más 1.800 euros al mes o 21.600 euros al año por 'indemizaciones por gastos', más 1.000 euros al año por compensación por el seguro de vehículo particular. En total 99.337,08 euros. Eso sí, sin coche oficial.

Un concejal menos en León

Paralelamente a la semana de ruptura de Vox con el PP a nivel autonómico, en la ciudad de León Vox ha perdido un concejal que se ha pasado a no adscrito en la corporación municipal leonesa. Un hecho que no tiene influencia en la gobernabilidad del consistorio en manos del PSOE. El concejal Ildefonso del Fueyo tomó la decisión debido a su grave enfrentamiento con la portavoz de Vox en el Ayuntamiento de León, Blanca Herreros, que le había quitado participar de comisiones después de votar a favor de actualizar los precios del parking del Hospital de León, lo que le dejaría con menos ingresos ya que él cobraba por asistencia a plenos y comisiones y la portavoz una dedicación exclusiva al 75%, en torno a 35.000 euros. Vox le ha exigido el acta a Del Fueyo, que además ejercía como Coordinador de Vox en la ciudad de León, pero no se espera que Del Fueyo la entregue.

En el otoño pasado Vox sufrió la baja de un concejal del partido en la localidad soriana de El Burgo de Osma, uno de los lugares donde Vox pactó con el PP para darles el gobierno. El concejal Miguel Ángel Miguel Andrés abandonó el partido por discrepancias con algunas de las decisiones de la formación de Santiago Abascal y dejó al partido sin uno de sus escaparates en la provincia soriana.

Y en Benavente (Zamora), donde el PP gobierna gracias al único concejal de Vox, éste ha amenazado con romper el gobierno municipal El también presidente de Vox Zamora, Eugenio Blanco, ha asegurado que seguirá en el gobierno de coalición siempre y cuando la Junta no ponga un centro de menores migrantes no acompañados en esa ciudad.

Vox tendrá ahora que recomponerse en Castilla y León, a la espera de si finalmente caen los gobiernos locales de Burgos o Valladolid, los principales en coalición que mantienen. Tanto los concejales de Vox como los alcaldes del PP han defendido su continuidad pero los designios de Abascal son inescrutables. Y las decisiones de los cargos, personales, y según Gallardo, “respetables”.