Albiol se queja de las “preguntas de examen” de la fiscal y alega que no se enteró de las antenas ilegales

“Señora fiscal, llevo cuatro años intentando que se me escuche, le pido disculpas si mis explicaciones son amplias”. Esta frase del alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, ayuda a comprender su declaración como acusado este lunes en el juicio por las antenas ilegales de Badalona. Durante casi una hora, Albiol ha rechazado cualquier responsabilidad en el caso e incluso se ha quejado, con ironía, de las “preguntas de examen” que, a su juicio, le ha formulado la fiscal.

No ha sido un examen sino un interrogatorio de casi una hora en un juicio penal en el que Albiol se juega la inhabilitación. Sin embargo, tras dos semanas de vista, que concluirá este miércoles con los informes de las partes, el ambiente es de optimismo entre las defensas del caso. Antes la Fiscalía tendrá que decir si mantiene o rebaja la petición de dos años y diez meses de prisión y otros diez de inhabilitación para Albiol por un delito de prevaricación. 

Junto al actual alcalde, se sientan en el banquillo quien fuera su exconcejal de Seguridad Miguel Jurado, ahora concejal del PP en Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), dos exgerentes del Ayuntamiento y el concejal de Urbanismo del gobierno de izquierdas de Badalona, Oriol Lladó, por la instalación sin licencia de dos antenas de telefonía en un terreno municipal en 2012. Las antenas no se retiraron hasta 2018.

La Fiscalía acusa a Albiol porque, en su primera etapa como alcalde, mantuvo las competencias en Urbanismo sin delegarlas a un concejal (como ocurrió durante el gobierno progresista con Lladó, concejal de la exalcaldesa Dolors Sabaté). En su declaración, que se ha alargado casi una hora, Albiol se ha descargado de responsabilidades en el caso: “Yo en el control de legalidad no entraba”.

Las preguntas clave de la fiscal Laura Ricart no han gustado a Albiol. La fiscal ha preguntado al alcalde si la potestad de conceder licencias se delegaba a la sociedad municipal Engestur o si quedaba en manos del consistorio, a lo que el alcalde ha manifestado que esa competencia “no se puede delegar a terceros”. Tampoco se podía delegar, ha añadido, la capacidad de sanción en materia de urbanismo.

La repregunta de la fiscal sobre la potestad sancionadora ha provocado la queja de Albiol, que ha considerado “preguntas de examen” las cuestiones de la fiscal. Con más elegancia, el presidente de la sección 5ª de la Audiencia de Barcelona, José María Assalit, ha recordado a la fiscal que el tribunal ya estaba “ilustrado” sobre las competencias municipales. “Normalmente, el Derecho es la plasmación del sentido común”, ha apostillado el magistrado para reconducir el interrogatorio.

“Si yo tuviera que estar pendiente de cada una de las gestiones que hace cada una de las sociedades municipales que yo presido, no haría otra cosa en el mundo”, ha manifestado Albiol, que ha recordado que también preside el Hospital de Badalona y no conoce el día a día del centro. “Pretender que el alcalde de la tercera ciudad de Catalunya conozca los movimientos de gestión de cada una de las sociedades municipales es imposible”, ha agregado.

Es más, Albiol ha asegurado que se enteró de que las antenas existían en 2018, esto es, seis años después y el mismo año de su retirada, cuando vio una noticia en la prensa sobre el asunto en El Periódico de Catalunya. No ha recordado Albiol la reunión en la que representantes de la Guàrdia Urbana, en cuyos terrenos estaban las antenas, le alertaron del potencial cancerígeno de las mismas.

“Si en esa reunión me hubiera enterado de que había una irregularidad, yo hubiera actuado”, ha afirmado el alcalde, que también ha asegurado que nunca vio nada problemático en la instalación. “Yo no me fijo si no hay antenas o no hay cables, no forma parte de mi curiosidad visual”. El juicio quedará visto para sentencia este miércoles.