La cifra de muertos por COVID-19 en residencias de Catalunya se duplica en una semana hasta superar los 1.000

Más de 1.000 ancianos que vivían en residencias en Catalunya han muerto por coronavirus. Pese a que las cifras globales de fallecidos por esta enfermedad parecen ralentizarse en la comunidad, no ocurre así en los geriátricos, donde el número de víctimas se ha disparado en la última semana. Y eso que el 20% de estos centros sigue sin aportar información sobre el estado de sus residentes.

Desde el 15 de marzo, un total de 1.123 ancianos que vivían en residencias han fallecido con coronavirus. La cifra se ha duplicado en menos de unas semana, puesto que el día 2 de abril solo se conocían 511 fallecidos, según los datos aportados por el Departamento de Asuntos Sociales. El aumento prueba la incapacidad de estos centros para aislar a los contagiados en sus mismas dependencias, aunque desde la Generalitat aseguran que se siguen los protocolos marcados por Salud.

A todo ello hay que añadir que muchos de estos ancianos no aparecen en el recuento oficial de fallecidos con coronavirus en Catalunya, como ocurre en otras comunidades como Madrid, puesto que el Departamento de Salud solo tiene en cuenta los decesos en dependencias sanitarias y buena parte de estas víctimas mueren en la propia residencia. Esta paradoja llega al extremo de que este jueves Salud informó de 133 fallecidos con coronavirus en toda Catalunya, cuando solo entre usuarios de geriátricos, la cifra fue de 214 muertes.

Actualmente hay en Cataluña 1.906 personas que viven en residencias, públicas y privadas, y que tienen diagnóstico de coronavirus, de las 64.093 que hay en total. En 239 de las 1.073 residencias, el 22,2% del total, se ha diagnosticado a personas de coronavirus y en otras 335 (el 31%) hay residentes con sintomatología.

Para aliviar la situación de estos centros, desde Asuntos Sociales han aprobado recientemente que las familias de aquellos usuarios sin síntomas puedan llevárselos a casa respetando un aislamiento de 14 días.. Esta es una petición que habrían formulado unas 220 personas. También se han abierto 128 plazas en clínicasd e mutuas laborales Barcelona para ancianos enfermos.

Pero desde los municipios se exige más para atajar una avalancha de contagios que se considera fuera de control. Uno de los ayuntamientos más exigentes es el de Barcelona, que ha acusado a la Generalitat de falta de transparencia en los datos y ha pedido que se traslade a equipamientos seguros a los cerca de 750 ancianos de sus 270 residencias que estiman que están contagiados.

La última reclamación del consistorio barcelonés tiene que ver con la residencia Mossèn Vidal i Aunós, de titularidad de la Generalitat pero gestionada por Eulen. A falta de tests proporcionados por la Administración catalana, la empresa los realizó por su cuenta y detectó que el 50% de sus ancianos estaba infectado. Desde el inicio de la epidemia han fallecido 9 personas mayores del centro.