ERC celebra este sábado su 29º Congreso Nacional en Lleida, marcado por las discusiones sobre los presupuestos y dos días después de que los republicanos aceptaran la demanda de construir la B-40 para acercar el acuerdo con el PSC.
La secretaria general del partido, Marta Vilalta, ha reivindicado este gesto como “una lección de generosidad” y ha pedido a los suyos “ir con la cabeza bien alta siempre, porque las decisiones complejas son para los valientes”.
Pocas horas después de este discurso, las bases de ERC han aprobado con un 96,7% de los votos su hoja de ruta que, entre otras cosas reitera la oposición del partido a “proyectos anacrónicos” como la B-40 o la ampliación del Aeropuerto del Prat. “No aceptamos lecciones por parte de los que siempre han dirigido la Renfe y la han convertido en el caos actual”, asevera el texto.
Vilalta ha apuntado que ERC hace una política “que no se mide en 'likes'” sino “en saber que se hace lo mejor para el país en cada momento”. Pero también ha lamentado que haya quien vea la política como “un chantaje permanente” y como una batalla para desgastar al adversario.
Por su parte, el president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha agradecido la madurez y empatía del partido ante “las decisiones complejas de los últimos días”. La intervención de Aragonès ante las bases se ha centrado en remarcar su propuesta de un acuerdo de claridad con el Estado sobre un referéndum de independencia. “Tenemos que decidir entre todos en un gran acuerdo, cuándo y cómo volvemos a votar”, ha dicho.
“El estado español no puede tratarnos permanentemente como menores de edad”, ha afirmado, para después reclamar un referéndum “acordado” entre todas las partes y con el compromiso de aceptar el resultado. “Así de simple y democrático. Así de imparable”, ha resumido.
Las bases del partido también han refrendado, vía la aprobación de la hoja de ruta, las condiciones del referéndum. El texto propone mantener el modelo de Montenegro (aunque sin nombrar específicamente al país), que apuesta por un 50% de participación y un 55% de apoyo para dar validez al 'sí'.
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha abierto el partido a “cualquiera que quiera hacer la independencia, pero no sepa bien bien cómo hacerla”. Igualmente, tras la aprobación de la hoja de ruta, ha tenido palabras para otras formaciones independentistas que no han hecho propuestas para llegar a la república: “Cuando no tienes un camino a recorrer, a veces querrías que nadie lo tuviera”, ha dicho.
Marta Rovira, exiliada en Suiza, que ha asegurado mediante una conexión telemática, que “nos queremos reivindicar claramente referendistas” y ha defendido la propuesta del referéndum como “la mejor opción” para proclamar la república. “Cuando tengamos acordada la fórmula, pongámosla con toda la máxima fuerza política y social sobre la mesa del gobierno español”, ha aseverado.
La dirigente republicana también ha apuntado que ERC está siendo “ampliamente criticada”, pero ha apuntado que su partido ha conseguido “la proeza” de condicionar la legislatura española y sentar a Pedro Sánchez en una mesa de negociación.
Vilalta ha tenido palabras de agradecimiento para Rovira y ha calificado su situación como “una venganza” del Estado contra ella. También ha recordado que el anterior congreso de ERC, en diciembre de 2019, se celebró sin la presencia del líder del partido, Oriol Junqueras; la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell y los exconsellers Raül Romeva y Dolors Bassa, que estaban en prisión, y de Meritxell Serret y Marta Rovira, que estaban exiliadas.
Por ello, ha asegurado que se conjuran para “seguir luchando para poner justicia donde solo hay injusticia”, ha asegurado. También ha criticado que, durante los últimos años, hayan tenido que realizar este proceso “con la represión encima, exilios, inhabilitaciones, persecución económica, espionajes ilegales y juicios pendientes”.
El congreso ha contado con la asistencia de todos los consellers y conselleras del Govern, excepto de la de Justicia, Gemma Ubasart, por cuestiones personales. En total, había1.400 personas inscritas en el encuentro, que también cuenta con representantes de la CUP, BIildu, BNG, SNP, PNC, Sinn Fein, Eusko Alkatasuna, Sortu y otras organizaciones. También están presentes los sindicatos UGT, CNT, CCOO, Intersindicat, CGT, Unió de Pagesos, las organizaciones empresariales Pimec, Foment, CECOT, Cercle d'Economia y entidades sociales como el Sindicat de llogateres, Som Escola, Plataforma per la Llengua, CAL, la Bressola, Alerta Solidària, Òmnium y la ANC.