Hay un hilo que une Célestin Freinet, pedagogo francés, con Antoni Benaiges, maestro catalán durante la Segunda República, y que enlaza con la Escuela Experimental Freinet de San Andrés de Tuxtla (México) e incluso con algunos maestros y escuelas del país. Es un hilo que fue robusto en épocas como la Segunda República y muy frágil durante el franquismo, etapa en la que acabó enterrado en las fosas comunes, hasta que posteriormente le exhumaron algunos retratistas comprometidos con la memoria como Sergi Bernal. Este hilo es el que une la historia de la renovación pedagógica, la de la fe de los maestros en el potencial creador de los niños y en su formación integral y crítica.
Esta tarea docente, cruelmente castigada después de una de sus etapas más brillantes -la Segunda República- vivió el miércoles, 4 de diciembre, su particular homenaje gracias al acto Escuela de la República, maestros de libertad, un cinefórum en el que se visionó el documental el retratista -todavía se puede ir a ver en los Cines Girona, de Barcelona-, y luego se debatió sobre el papel de los maestros de la época y la importancia de la memoria histórica en ámbitos como la educación. Participaron los autores del largometraje -Alberto Bougleux y Sergi Bernal- y la pedagoga Irene Balaguer y el prestigioso historiador Josep Fontana. Todos reunidos , además , al hilo de la presentación del Diario de la Educación, un proyecto periodístico que se pondrá en marcha el próximo 15 de enero a partir de la fundación Periodisme plural, editora de Catalunyaplural.cat.
Antoni Benaiges, protagonista del documental El retratista, fue un maestro catalán innovador, que logró dejar huella entre los escolares del pequeño y conservador pueblo de Bañuelos de Bureba (Burgos) pocos años antes del estallido de la Guerra Civil. Aplicando la pedagogía Freinet (en la que la imprenta y la escritura libre de los niños juega un papel central), Benaiges trabajó por la transformación social de su entorno. Y lo acabó pagando con la vida. El verano del 36 se quedó en Bañuelos con intención de llevar a sus alumnos a ver el mar -se lo había prometido y los niños habían escrito sobre lo que esperaban del viaje -, y el alzamiento franquista se lo llevó por delante.
“Con razón el levantamiento militar fue contra la escuela”, explicaba el profesor Fontana durante el coloquio. Por dos razones, esgrimía: “Por su esfuerzo en el terreno de la educación como palanca de emancipación social y de formación de ciudadanos, y por la formación también de maestros muy elogiada”. Y el franquismo no tuvo compasión: 21 maestros asesinados en la provincia de Burgos y 1.500 depurados, según los datos aportados por Fontana.
Como muchos de sus compañeros de profesión, Benaiges “era un maestro pero sobre todo un hombre de progreso”, y además una persona “feliz”. Este concepto -la felicidad- fue citado también por Irene Balaguer al hablar de los valores que transmitían los maestros de la época. Y precisamente queda retratado también en el documental, donde una de las exalumnas, ahora nonagenaria, de Benaiges acaba reconociendo que, por encima de todo, el maestro les hizo felices.
La actualidad: oportunidades y amenazas
Alberto Bougleux reivindicó en su intervención que actualmente -ahora , hoy y a pesar de todo- hay muchos maestros que están dispuestos a creer en la fantasía de los niños y jóvenes, y a darles voz. Así lo expresaba también Balaguer, que animaba a todos los maestros- la platea del cine estaba llena de ellos, a integrar asociaciones y asambleas de maestros en sus localidades, para hacer como Benaiges, que se reunía con compañeros de profesión en encuentros informales para compartir experiencias pedagógicas y debatir sobre proyectos y metodologías.
“Hay más o menos margen para aplicar en las aulas pedagogías como la de Freinet, sobre todo si contamos con la insistencia y la capacidad de muchos de nuestros maestros” , expresaba Balaguer. En San Andrés de Tutxla (México), la Escuela Experimental Freinet mantiene este legado - transmitido por un maestro exiliado y amigo de Benaiges, Patricio Redondo.
Pero también hay quien amenaza los avances. Y no es sólo la ley Wert, que también se citó en el debate. Josep Fontana fue más allá y puso el ejemplo de la “guerra abierta” que se da en los EEUU contra la educación pública Porque es considerada “ineficaz” por los gobernantes debido a la poca flexibilidad de los puestos de trabajo, por lo que quieren dar más poder a los directores para controlar y despedir a los maestros. Una guerra azuzada, según Fontana, también por fundaciones como la de Bill Gates o WallMart.
Y fue precisamente Fontana quien cerró el acto haciendo una reflexión sobre el papel de los maestros: “El maestro debe enseñar a pensar, a no creer nada de entrada, a ejercitar la razón. El problema no es lo que enseñamos, sino el cómo dar las herramientas para que los alumnos aprendan a razonar”.
Hay un hilo que une Célestin Freinet, pedagogo francés, con Antoni Benaiges, maestro catalán durante la Segunda República, y que enlaza con la Escuela Experimental Freinet de San Andrés de Tuxtla (México) e incluso con algunos maestros y escuelas del país. Es un hilo que fue robusto en épocas como la Segunda República y muy frágil durante el franquismo, etapa en la que acabó enterrado en las fosas comunes, hasta que posteriormente le exhumaron algunos retratistas comprometidos con la memoria como Sergi Bernal. Este hilo es el que une la historia de la renovación pedagógica, la de la fe de los maestros en el potencial creador de los niños y en su formación integral y crítica.
Esta tarea docente, cruelmente castigada después de una de sus etapas más brillantes -la Segunda República- vivió el miércoles, 4 de diciembre, su particular homenaje gracias al acto Escuela de la República, maestros de libertad, un cinefórum en el que se visionó el documental el retratista -todavía se puede ir a ver en los Cines Girona, de Barcelona-, y luego se debatió sobre el papel de los maestros de la época y la importancia de la memoria histórica en ámbitos como la educación. Participaron los autores del largometraje -Alberto Bougleux y Sergi Bernal- y la pedagoga Irene Balaguer y el prestigioso historiador Josep Fontana. Todos reunidos , además , al hilo de la presentación del Diario de la Educación, un proyecto periodístico que se pondrá en marcha el próximo 15 de enero a partir de la fundación Periodisme plural, editora de Catalunyaplural.cat.