La Audiencia Nacional tumba la investigación de los Mossos sobre anarquistas y archiva el caso Pandora II
Severa corrección de la Audiencia Nacional a las investigaciones de los Mossos d'Esquadra sobre colectivos anarquistas catalanes. El tribunal ha archivado el denominado 'caso Pandora II', por el que la policía catalana detuvo a nueve personas y registró una decena de locales libertarios y viviendas particulares en una operación contra una supuesta “organización terrorista de corte anarquista”. Para la Audiencia Nacional el delito de terrorismo no se sostiene ya que las investigaciones de los Mossos no han permitido llevar a ningún indicio sobre el mismo.
En un auto de cuatro páginas, la magistrada del juzgado de instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, indica que del conjunto de pinchazos telefónicos y documentación incautada en los registros “el único resultado obtenido por los investigadores [los Mossos d'Esquadra] es la comprobación de que los investigados se relacionan con personas del colectivo anarquista”.
Asimismo, la magistrada afea a la policía catalana la poca información que ha trasladado a su juzgado tras los registros practicados en octubre de 2015, cuando se incautaron varios documentos y material informático. “No se ha aportado el resultado del estudio de los datos obtenidos pese a los reiterados recordatorios practicados por este juzgado”, señala el auto. De hecho, los Mossos, según el auto, ni siquiera contestaron el último recordatorio que el juzgado llevó a cabo el pasado 29 de abril.
“Las afirmaciones genéricas que se realizan carecen de base objetiva sólida en el contenido de las conversaciones que se han ido facilitando”, indica el auto sobre los pinchazos telefónicos practicados por la policía autonómica. “No se ha indicado a lo largo de la investigación qué frases o conversaciones concretas pudieran estar refiriéndose a un acto concreto de terrorismo”, añade.
“No se advierte en definitiva ningún avance sustancial que permita continuar con la investigación”, concluye la magistrada antes de ordenar el archivo de la causa. El movimiento libertario catalán viene manteniendo desde que se produjeron los registros y las detenciones que el caso Pandora era una “operación política”.