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Ayuno para pedir una renta garantizada de ciudadanía

Una quincena de personas han iniciado un ayuno de tres días para pedir la aprobación de la ley de renta garantizada de ciudadanía y reclamar que se incorpore una partida específica en los presupuestos del 2017. El ayuno terminará el martes por la tarde con una manifestación que irá desde la plaza de Sant Jaume hasta el Parlament de Catalunya, donde se estarán debatiendo los presupuestos. De momento está previsto que estén instalados en tiendas de campaña en la plaza de Sant Jaume para dar a conocer esta iniciativa legislativa popular entre la ciudadanía.

Los impulsores de la ILP, bajo el lema “Por una Catalunya sin pobreza, renta garantizada de ciudadanía, ya!”, han presentado una carta que entregarán a la Generalitat en la que solicitan que se tenga en cuenta la renta garantizada en los presupuestos del 2017. Piden que sea de 664 euros mensuales, una cifra que Junts Pel Sí considera demasiado elevada. El portavoz de la plataforma, Diosdado Toledano, valora como “un auténtico esperpento” el hecho de que en los presupuestos no haya incluida ninguna partida para la renta básica garantizada. Con esto dice que “se está incumpliendo el mandato del Parlament que aprobó una moción en octubre por unanimidad para aprobar la ley el próximo año”.

Actualmente la proposición de ley tiene el apoyo de todos los grupos parlamentarios excepto el de Junts Pel Sí. La ILP llegó al Parlament en 2014 con más de 120.000 firmas y el pleno la admitió a trámite en marzo de 2014. Sin embargo, de momento no se ha establecido calendario de aprobación ni el importe exacto de la prestación.

Toledano ha reafirmado la necesidad y urgencia de aprobar la ley, ya que dice que hay más de medio millón de personas que viven en condiciones de extrema pobreza en Catalunya y que cobran menos de 334 euros al mes. Desde la plataforma avisan de los peligros que conlleva que una persona viva en condiciones de extrema pobreza, tales como presentar síntomas de depresión, desesperanza e incluso llegar al suicidio por la pérdida de una vivienda o el corte de suministros.