El Ayuntamiento de Barcelona presume de la reducción de delitos mientras subraya que crecen en Madrid

El Ayuntamiento de Barcelona está decidido a combatir la imagen de que la capital catalana es una ciudad violenta y especialmente afectada por la criminalidad. Y tiene datos para ello. El equipo de Ada Colau ha elaborado un informe a partir de las cifras oficiales del Ministerio del Interior en el que destaca que Barcelona ha vuelto a ser en el tercer trimestre de 2022 la gran ciudad española que más ha reducido los delitos respecto al mismo periodo de 2019. Una realidad que en el informe ponen en contraste con los números de Madrid, que empeoran en prácticamente todos los registros, pero especialmente para los delitos más graves, como asesinatos e intentos de homicidio.

Durante los nueve primeros meses del año, en Barcelona los delitos contra la integridad física se redujeron más de un 70% respecto al mismo periodo de 2019, una caída especialmente acusada por lo que respecta a homicidios consumados, que pasaron de 15 a ocho. En Madrid, en cambio, la tendencia es prácticamente la contraria, con un aumento del 26% en los delitos contra la integridad física y un registro de asesinatos consumados que ha pasado de los ocho a los 19 en el periodo estudiado. De las grandes ciudades, solo Sevilla sale peor parada que la capital española, pues el aumento de este tipo de criminalidad crece un 31%, cinco puntos más que Madrid.

La categoría en la que todas las ciudades salen malparadas es la de los delitos contra la integridad sexual, una tipología en la que las denuncias no han parado de aumentar en los últimos años. Pese a que en todas las localidades estudiadas los registros de estos delitos aumentan, en Madrid las denuncias por violación con penetración han crecido tres veces más que en Barcelona, un 36% y un 12% respectivamente. Mientras, en el resto de delitos contra la libertad sexual, ambas ciudades se sitúan en escenarios de crecimiento similar, aunque de nuevo la capital catalana queda algo por debajo, con un 27% y un 29% respectivamente.

En los delitos contra la propiedad, de nuevo Barcelona muestra una reducción récord comparado con otras grandes ciudades. Es la que más rebaja los delitos contra la propiedad en general (un 18%), mientras Madrid los reduce un 10%. En concreto, la capital catalana es la líder en reducción de hurtos (-30%) y robos de vehículos (-39%). Barcelona es, en cambio, la ciudad donde más aumentaron los delitos de tráfico de drogas, donde se triplicaron, mientras en Madrid, Valencia o Sevilla el crecimiento es mucho más moderado.

Intercambio de reproches Madrid-Barcelona

El informe del Ayuntamiento de Colau es muy explícito a la hora de interpretar los datos del Ministerio del Interior como un toque de atención hacia la ciudad de Madrid. Según afirma, mientras que la criminalidad en Barcelona se reduce de forma considerable, en la capital española están viviendo datos récord en algunos tipos de delitos especialmente graves, como los que tienen que ver con la integridad física. De esta forma, el consistorio de Barcelona le devuelve la pulla al PP de Madrid, que lleva meses repitiendo mensajes alarmistas sobre Barcelona.

En septiembre pasado, cuando hubo disturbios durante las fiestas de La Mercè, la presidenta de la Comunidad de Madrid aprovechó para hacer un discurso sobre seguridad que dibujaba una realidad falsa y que, además, cargaba directamente sobre los responsables políticos. Colau “ejerce un desprecio sistemático al orden y a la ley”, dijo Isabel Díaz Ayuso. “Al final, lo que consiguen es que en sus ciudades proliferen los hurtos, los atracos y el malestar y la inseguridad ciudadana. No es casualidad eso; es fruto de unas políticas que yo no comparto”, afirmó la presidenta de Madrid.

No fueron las únicas referencias que Ayuso hizo sobre la capital catalana. Durante este otoño, la política madrileña se ha referido en diversos momentos a políticos catalanes, tanto a la alcaldesa como a diversos dirigentes autonómicos. “Está buscando pelea”, afirmó Colau en un vídeo colgado en Tiktok en noviembre pasado. “La señora Ayuso tiene por costumbre meterse con la gente en general”, afirmó la primera edil, “se mete con los médicos, se mete con los maestros, se mete con los inquilinos, se mete con los taxistas, y se mete a menudo con la ciudad de Barcelona. Y además suele utilizar bastantes fake news, mentiras constantes, para decir que nuestra ciudad está decadente”, se quejó Colau.