El ayuntamiento de Barcelona investiga un posible fraude de FCC, la empresa encargada de la recogida de basura en tres distritos, que habría costado a las arcas unos 800.000 euros. Los tenientes de alcaldía Janet Sánz y Jaume Asens han comparecido este jueves para anunciar la apertura de expediente y la denuncia de los hechos ante la Fiscalía, a raíz de una investigación del diario El País.
Según informa el medio, la delegación en Barcelona de FCC Servicios Ciudadanos habría manipulado en los últimos años datos del servicio de limpieza y recogida de residuos en la capital catalana con el objetivo de hinchar sus ingresos en unos 800.000 euros a costa del ayuntamiento barcelonés.
Una investigación propia del rotativo constata que las irregularidades se centran en los residuos destinados al reciclaje -plástico, tetrabriks...- y los muebles y trastos viejos, llamados “voluminosos”, por los que la empresa cobra según un sistema de tramos. El comisionado de Ecología del Ayuntamiento, Frederic Ximeno, ha asegurado que, indiciariamente, la mezcla de basuras reciclables y no reciclables se habría producido en dos de los tres distritos en los que FCC opera y mediante un desvío de los circuitos de la recogida de basura.
El presunto fraude consistía en alterar las cantidades de cada tipo de basura recogida. El sistema de cobro implica que el Ayuntamiento paga menos por tonelada a medida que el volumen de recogida de residuos crece, por lo que se puede dar el caso de que, al saltar un tramo por un escaso margen, FCC acabe ingresando menos dinero si no se hubiera sobrepasado ese límite.
Según algunos correos a los que ha tenido acceso el periódico, algunos responsables de FCC maniobraban para no saltarse algún tramo de toneladas recogidas y evitar así pérdidas para la empresa. Para ello, en ocasiones se llegaron a mezclar residuos para el reciclado con desechos sin reciclar, llamados “de rechazo”, con el objetivo de que toda la carga pasara como si fuera basura de este último tipo.
“Es una ofensa no solo al ayuntamiento sino a toda la ciudadanía en un ámbito muy sensible como es la recogida de basura”, ha asegurado el teniente de alcaldía Jaume Asens, responsable del área de tranparencia. “Estamos delante de una trama organizada para eludir los sistemas de control. Esta trama ha conseguido saber el sistema de control y burlarlo”, ha indicado.
Los tenientes de alcaldía han aclarado que, además de la vía penal por la vía de la denuncia a Fiscalía, podría haber una rescisión del contrato con la empresa o sanciones, “según cómo se cualifiquen la calificación de este hecho a lo largo del proceso administrativo”, han considerado.