Colau se compromete a proteger del tráfico y la contaminación a 200 colegios de Barcelona durante este mandato

Una nueva señal naranja advierte a los conductores de que se acercan al colegio Grèvol, en el distrito de Sant Martí de Barcelona. El tráfico y los aparcamientos se han reducido a la mitad –en ambos casos, de dos carriles a uno– frente este centro, el primero de un plan que a lo largo de este mandato ha de transformar el entorno de 200 escuelas. Al menos este es el compromiso del Ayuntamiento. 

Hasta cuatro concejales y la alcaldesa, Ada Colau, han acudido a la presentación de este proyecto, que defienden que ha de servir para proteger a los niños y niñas de la contaminación, el ruido y los accidentes. “El coche no puede ser la prioridad de la ciudad, deben ser las personas y especialmente las más vulnerables”, ha proclamado la alcaldesa, que ha situado como eje clave del inicio de mandato la mejora por la calidad del aire, con la Zona de Bajas Emisiones como medida estrella.

Las actuaciones en entornos escolares incluirán la reducción tanto de la velocidad –a 20 km/h– como del tráfico –carriles y aparcamientos– siempre que se pueda, según la teniente de alcaldía de Ecología, Urbanismo y Movilidad, Janet Sanz. En el caso del colegio Grèvol, la eliminación de dos carriles ha permitido pacificar el espacio frente a la puerta del colegio con bancos y jardineras para que los padres y madres puedan esperar ahí a sus hijos y estos puedan jugar un rato al salir de clase. 

El gobierno municipal ha reservado 10 millones de euros para estas obras. El calendario de actuación implica actuar en entre 20 y 35 escuelas al año hasta 2023 hasta alcanzar las 120. Otras ochenta se beneficiarán también de actuaciones no específicas pero sí de pacificación de calles, como son las supermanzanas. Si se cumplen los plazos, el proyecto afectará a uno de cada tres centros de Primaria.

De un tiempo a esta parte, los colegios se han convertido en una de las puntas de lanza de la lucha contra la contaminación en Barcelona. Después de que la entidad Eixample Respira estimara que en uno de cada tres los niveles de NO2 son superiores a los permitidos por la UE, decenas de asociaciones de padres y madres exigieron por carta a Colau un plan para mitigar la polución en sus entornos. 

Entre los colegios que se beneficiarán de estas reformas en 2020 están la Escuela Carlit, la Escuela Marillac, la Escuela 9 graons, la Escuela Xirinacs, Escolàpies Llúria, Sagrat Cor Diputació, Institut Viladomat i la Escuela Sagrada Família. No ha sido casual que el equipo de Colau haya escogido Grèvol para las primeras actuaciones y la presentación del plan: el pasado mes de octubre murió atropellado por una moto un niño de 5 años, a la salida del colegio.