El gobierno de Jaume Collboni ha decidido aumentar desde mediados de agosto las sanciones por incivismo, que subirán de media un 55%. Así lo anunció el miércoles el teniente de alcaldía de Seguridad, Albert Batlle, que espera que el endurecimiento sea efectivo a partir del 9 o 10 de agosto.
Algunos de los ejemplos de incivismo que saldrán más caros a los ciudadanos a partir de entonces serán orinar en la calle (pasará de 200 a 300 euros) o hacer pintadas en edificios (de 300 a 500 euros, o hasta 600 si son edificios patrimoniales). Por otro lado, por beber en la calle se podría aplicar la sanción más alta ya existente, que son 600 euros de multa en algunos casos.
Batlle ha asegurado que serán “muy exigentes” con la ciudadanía y por eso se incrementan las multas aplicando el rango medio-alto que se puede atribuir por ahora a los comportamientos que causan “más impacto”. La Guardia Urbana ya está dando indicaciones a los agentes sobre este cambio para que lo tengan presente.
El catálogo de sanciones, como tal, se modificará y se incrementará más adelante, puesto que es necesario modificar la ordenanza de civismo para formalizarlo. La modificación de la ordenanza tiene que ser aprobada por el plenario, ha recordado Batlle, que ha matizado que las sanciones se pueden incrementar cuando se pongan las multas.
Por otro lado, una de las medidas que ya se ha desplegado es el aumento de la presencia de Guardia Urbana en la calle, con 107 agentes más diarios este verano para garantizar la convivencia y el orden de la ciudad. No son nuevos agentes, sino un centenar de policías de la plantilla que trabajarán haciendo horas extras.
'Pla Endreça'
El incremento de las sanciones y el reforzamiento de la presencia de la Guardia Urbana se enmarcan en los esfuerzos del Ayuntamiento para mejorar las percepciones sobre limpieza e inseguridad en la ciudad. La teniente de alcaldía de Urbanismo, Transición Ecológica, Servicios Urbanos y Vivienda, Laia Bonet, ha explicado que el 'Pla Endreça' quiere dar respuesta a estos problemas.
“La percepción ciudadana nos indica que podemos hacerlo mejor y por eso necesitamos trabajar más”, ha dicho Bonet, que ha admitido que los resultados son “insatisfactorios” teniendo en cuenta la cantidad de recursos que el consistorio dedica a la limpieza y el mantenimiento de la ciudad.
La teniente de alcaldía ha asegurado que hay que “repensar” los recursos ya existentes y reorientarlos. Los tres ámbitos clave del plan serán la limpieza y el mantenimiento, una de las grandes “prioridades” de mandato, la convivencia y la percepción de seguridad y civismo, y la actuación en el territorio con acciones de proximidad.
Por ejemplo, se reorientarán un centenar de trabajadores a reforzar las brigadas de intervención rápida en los barrios para resolver de forma rápida cualquier problema de limpieza que se pueda detectar. Aunque los recursos para hacer frente a la limpieza y el mantenimiento en la ciudad serán los mismos, se reorganizarán según las prioridades.
Otros servicios que se priorizan son los de limpieza de parques: 21 equipos y 37 personas; y el de la zona de las playas: que tendrá 3 equipos y 6 personas. También se incrementa la limpieza de las zonas de contenedores: en total se añaden 19 equipos y 27 personas. Asimismo, se prima la limpieza de manchas del pavimento y la limpieza con agua freática, con 17 equipos y 23 personas.
Según ha anunciado Bonet, a partir de este jueves se inicia una campaña de comunicación del 'Pla Endreça', que se alargará hasta el 15 de septiembre. La campaña servirá para fomentar el civismo.