La reconstrucción de Can Vies no sólo depende de la fuerza de voluntad de los activistas y vecinos de Sants; una vez ya se han retirado los escombros del espacio de la finca que quedó derruido el día después de las elecciones europeas, ahora hace falta dinero para financiar el material de obra. Mazos, madera, palets, cubos, argamasa... O para pagar el alquiler de los contenedores que se utilizaron para llevarse los escombros. Todo esto tiene un coste, y desde Can Vies han decidido cubrirlo con una campaña de micromecenazgo a través de Verkami, que se pondrá en marcha en las próximas semanas.
Aunque no quieren estimar todavía cuál será la cuantía que pedirán, el colectivo okupa, que ayer celebró su asamblea semanal con los vecinos de Sants, ya adelanta que el dinero también servirá para hacer frente a los “gastos antirepresivos”. Esto es, para pagar los costes de los procesos judiciales de los hasta ahora 67 detenidos tras una semana entera de manifestaciones derivadas en disturbios con la policía. Lo que será más difícil, según reconocen, será asumir también la fianza de 10.000 euros que se ha impuesto a uno de los dos detenidos en prisión preventiva.
A estas alturas, y después de varias jornadas de trabajo en las que han participado numerosas personas, la parte derribada de Can Vies -correspondiente a la antigua capilla-, ya está completamente limpia. Donde antes todo eran escombros, ahora lucen dos jardineras con flores. Falta por ver a qué se dedicará el espacio, aunque en más de una ocasión Can Vies ya ha avanzado que se podría habilitar un pequeño parque infantil.
Entrarán bomberos y operarios municipales
El reto ahora es rehabilitar la parte de la histórica finca que aún se mantiene en pie. A pesar de la certeza, según los técnicos que asesoran Can Vies, de que no hay peligro de derrumbe, lo cierto es que no es seguro trabajar allí, porque sí hay riesgo de pequeños desprendimientos. Esta parte interior está dañada porque el día del derribo los operarios hicieron algunos agujeros y derribaron el torreón que se levantaba en el tejado del edificio.
Así pues, la retirada de los escombros de la parte interior del edificio irá a cargo de los bomberos y operarios municipales. En un comunicado, el colectivo de Can Vies asegura que “velará por el correcto desarrollo de las tareas de limpieza en el interior del edificio”. No pondrá pegas, por tanto, a la intervención del Ayuntamiento de Barcelona, al igual que no lo hicieron cuando se retiró la excavadora calcinada del espacio. Esto no quiere decir, sin embargo, que las negociaciones entre las dos partes se hayan reestablecido, al menos públicamente.
Aprovechando el comunicado, desde Can Vies quisieron felicitar el tercer aniversario de Can Batlló, un centro de origen fabril también ocupado por los vecinos de Sants, y los nuevos espacios okupados el fin de semana en Barcelona: el Ateneo La Porka -en el barrio de Sant Antoni- y el Ateneo Popular el Rec -en el Fort Pienc-.