Mas: “Cataluña siente afecto por España, pero ya no confía en el Estado español”
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha iniciado este miércoles el primer debate de política general de su segunda legislatura al frente del Gobierno con un compromiso: antes del 2014 habrá una fecha fijada para la celebración de la consulta soberanista y una pregunta, y ya se sabrá cuál será el marco legal que se empleará para llevarla a cabo. “Utilizaremos todos los instrumentos democráticos y legales para que el pueblo catalán pueda decidir”, ha afirmado el presidente en sede parlamentaria, para añadir -como ya anunció- que “como último recurso” no descarta unas elecciones plebiscitarias para el ejercicio de la autodeterminación.
Mas ha hecho esta promesa con la intención, según ha dicho, que la fecha y la pregunta de la consulta sean fruto del acuerdo de todas las formaciones políticas partidarias del derecho a decidir , así como de la complicidad del Estado español. “¿El Estado acepta una consulta en Cataluña para conocer la voluntad del pueblo sobre el futuro político de nuestro país? ¿Si es que no, qué negociamos?”, se ha preguntado Mas.
En este sentido, Mas se ha mostrado muy contundente con la actitud hasta ahora demostrada ante el proceso soberanista por el Estado, al que considera que, “normalmente altivo y displicente con las cuestiones nacionales catalanas, casi siempre tan perdonavidas como ignorante, no tiene más remedio que constatar que tiene un problema”. En la misma línea, el president ha concluido: “Cataluña siente afecto por España, la quiere, pero ya no confía en el Estado español”.
A lo largo de su discurso, que iniciaba un debate parlamentario que durará hasta el viernes, Mas ha explicado que su Ejecutivo trabajará “cuatro grandes ejes que perfilarán el futuro de Cataluña”. Estos son, según el president, el proceso político basado en la transición nacional, la situación de las arcas públicas de la Generalidtat y las políticas públicas que de ello se dependen -ha asegurado que no habrá recortes en 2014-, las “políticas de empleo y de mantenimiento del Estado del Bienestar”, y la “restitución de la confianza de los ciudadanos en las instituciones”.
Los funcionarios recuperarán la paga extra si el Estado desbloquea el impuesto a la banca
Más allá del debate en torno al proceso soberanista, Mas también ha prometido que el 2013 será el último año de recortes presupuestarios. El president ha asegurado que en 2014 se mantendrá el grueso de las cuentas de este año -prorrogadas desde el curso pasado- y ha anunciado que, si el Estado desbloquea el impuesto a los depósitos bancarios que presentó la Generalitat, no se recortará la paga extra a los funcionarios el próximo año, tal y como el consejero de Economía ya anunció que harían.
“No podemos gastar ni un euro más que en 2013, pero tampoco gastaremos menos; por primera vez, no habrá recortes”, ha resumido Mas, que ha recordado que el presupuesto de la Generalitat se ha reducido en un 20% en tan sólo tres años. El presidente ha culpado de ello al trato “desleal” que dice recibir del Ejecutivo central y a la herencia del tripartito, el responsable, según Mas, de que ahora mismo la Generalitat tenga que pagar en intereses financieros hasta 5.000 millones de euros, el equivalente a todo el presupuesto del departamento de Enseñanza.
