Catalunya dará “pasos atrás” en la desescalada y aplaza la vuelta al colegio al 11 de enero
Catalunya reculará en la desescalada y estudia en estos momentos qué medidas restrictivas adoptar para frenar el repunte de contagios. La consellera de Salud, Alba Vergés, ha constatado que los actuales indicadores epidemiológicos, que dibujan el inicio de una tercera ola, les llevan a “tomar decisiones y a dar pasos atrás sí o sí en esta apertura”. Lo que no ha concretado es qué actuaciones se llevarán a cabo, a la espera de que sea el Govern en su conjunto el que lo apruebe.
Todos los mensajes lanzados por el Govern este miércoles han ido en la misma línea. Lo expresaba el secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon, al constatar que la epidemia evoluciona “realmente rápido”, y lo remarcaba el vicepresident Pere Aragonès desde el Parlament, donde anunciaba que no les temblará el pulso a la hora reculer en el plan de reapertura si los datos siguen yendo a peor.
Finalmente ha sido Vergés, en una rueda de prensa de balance del trimestre escolar, la que ha confirmado que con la Rt –el indicador de la velocidad de contagios– por encima de 1 (está alrededor de 1,4), van a tener que dar marcha atrás en un plan de desescalada. En estos momentos, Catalunya estaba en el tramo 1, con bares y restaurantes abiertos, y con algunas medidas de la fase 2, como la reapertura de centros comerciales y el confinamiento comarcal de fin de semana.
El secretario de Salut Pública ha explicado en una entrevista a ElDiario.es que la Generalitat había implementado otro método de análisis más exacto gracias a las pruebas de antígenos. Con esta nueva medición, las cifras de Catalunya son mucho peores de lo que se pensaba y, este miércoles, la velocidad de transmisión del virus se situaba por encima del 1,4, con casi un 30% más de contagios de los detectados. A esto se suman los 345 pacientes que hay en este momento en las UCI catalanas.
Vuelta a la escuela el 11 de enero
En la rueda de prensa de balance del trimestre, Vergés y el conseller de Educación, Josep Bargalló, han explicado también que el curso escolar tras las vacaciones de Navidad en Catalunya no se retomará el 8 de enero, tal como estaba previsto en el calendario, sino finalmente el lunes día 11. El Departamento de Educación así lo ha decidido para ganar unos días de margen entre los posibles encuentros familiares durante las fiestas y la vuelta a las clases y evitar así más riesgo de contagios.
La decisión, comunicada este miércoles a los sindicados –y que ha hecho público inicialmente CCOO–, conllevará solo la pérdida de un día de clase. El 8, cuando estaba previsto el inicio del segundo trimestre, cae en viernes. Al contarse ahora este día como festivo, de acuerdo con un decreto que se aprobará en breve, simplemente se aplaza el regreso al lunes, día 11.
Además, el Departamento de Educación ha comunicado también a los sindicatos que durante las primeras tres semanas de clases se realizará un cribado masivo con PCR a todo el profesorado y trabajadores de los centros. La campaña de pruebas de COVID-19 se hará mediante kits de automuestra que se repartirán en los colegios y que los trabajadores se harán ellos mismos, para que luego los recojan los responsables sanitarios
En cuanto al transcurso del trimestre y a la afectación del virus a las escuelas, los consellers han celebrado que finalmente los centros se han demostrado “espacios seguros”. El 78% de los alumnos catalanes han completado los tres primeros meses del curso sin haber dejado de ir ni un solo día a clase por culpa del coronavirus. Es decir, que solo uno de cada cinco se ha tenido que confinar en algún momento por haberse detectado un positivo en su grupo burbuja.
Aragonès: “Es extremadamente preocupante”
“No vamos bien. Nada bien. La evolución de la pandemia en los últimos días es extremadamente preocupante”. Con estas palabras y sin paños calientes exponía el vicepresident de la Generalitat, Pere Aragonès, la situación de la COVID-19 en Catalunya, después de que el secretario de Salut Pública, Josep Maria Argimon, revelase en este diario que la velocidad de los contagios es mucho peor de lo que se creía. Con los nuevos datos la alarma ha saltado en el Govern. “Hoy no está en duda avanzar o no de tramo. Si no hay mejoras de los datos, habrá un paso atrás”, ha advertido Aragonès, horas antes de la comparecencia de los consellers de Salud y Educación.
Las autoridades sanitarias se han reunido este miércoles a primera hora, un encuentro en el que han analizado el empeoramiento de la situación. Una de las primeras medidas ha sido el retraso de un día en la vuelta a la escuela tras las vacaciones navideñas, una decisión que abre el camino del Govern en la posible marcha atrás sobre la que Aragonès ha advertido, pero en las próximas horas podría haber nuevos anuncios. También el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha planteado en el Congreso la opción de endurecer el plan de Navidad.
“Ya dijimos que no nos temblaría el pulso”, ha asegurado Aragonès en una comparecencia con la que ha cerrado el año en el Parlament. En su discurso, el vicepresident ha hecho un balance positivo de la legislatura, que ha calificado como de “represión y acuerdos”, a la vez que ha remarcado que el objetivo del Govern que ha acabado dirigiendo tras la inhabilitación de Quim Torra es la independencia de Catalunya. La oposición ha cargado contra el vicepresident por un balance, a su juicio, demasiado triunfalista, ya que Ciudadanos, PSC y los 'comuns' han coincidido en que Aragonès no ha hecho autocrítica.
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