La Generalitat pondrá en marcha a partir de marzo una comisión que controle la difusión de terapias pseudocientíficas. Más allá de la multa impuesta esta semana al congreso Un mundo sin cáncer, el departamento de Salud se plantea cómo mantener una supervisión periódica de todos los eventos, webs y publicaciones en los que se publicitan pseudoterapias peligrosas para la salud pública.
“Su principal función será identificar qué oferta hay de estos productos y terapias y estudiar si podemos adoptar medidas para proteger a los pacientes”, comenta a eldiario.es Neus Rams, directora general de Ordenación Profesional y Regulación Sanitaria del departamento de Salud. La comisión estará integrada por profesionales de Salud, de la Agencia Catalana de Consumo y de varios colegios profesionales (como el de Médicos o de Farmacéuticos), aunque todavía no se ha decidido cuántos serán, cada cuándo se reunirán ni con qué presupuesto contarán.
El principal foco de estudio de esta comisión, de entrada, será examinar los cursos y jornadas en los que se difunden productos y tratamientos para el cáncer. “En esta enfermedad es donde hay más incidencia de oferta de este tipo de terapias”, asegura Rams, “porque se trata de pacientes especialmente vulnerables y, por lo tanto, más susceptibles de ser seducidos por falsas expectativas”.
Es lo que sucedió el pasado 13 de enero en el congreso organizado por Cocó March en Barcelona, que ahora ha sido multado por el departamento de Salud. Ante 700 inscritos, ponentes como Txumari Alfaro, divulgador de remedios naturales, llegó a aconsejar a la madre de una paciente de cáncer de mama “tomar conciencia” y “no hacer nada” para avanzar en la curación de la enfermedad.
Pasos de una Administración hasta ahora pasiva
Pese a que médicos y asociaciones de pacientes llevan años pidiendo más dureza por parte de la Administración para censurar mensajes que consideran que pueden poner en peligro a la ciudadanía, no hay demasiados precedentes en España de lucha institucional contra las pseudociencias. Congresos como Un mundo sin cáncer suelen celebrarse ante la pasividad de las Administraciones, según lamentan desde la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas.
Su presidenta, Elena Campos-Sánchez, valora la nueva comisión de Salud como un “paso en la buena dirección”, como lo fueron las instrucciones que la Generalitat valenciana envió a facultativos para evitar tratamientos sin evidencia científica. Lo más parecido a una comisión de seguimiento sería el Observatorio contra las Pseudociencias de la Organización Médica Colegial de España.
“Estamos saliendo de muchos años de dejadez”, considera Fernando Frías, abogado especializado en la materia, que defiende que existe abundante legislación que impide la difusión de tratamientos y productos con finalidad sanitaria sin estar testados científicamente. La propia Ley General de Sanidad prevé “limitaciones preventivas” de las actividades que “puedan tener consecuencias negativas para la salud”, algo que encaja, según Frías, con estos eventos.
La propia Generalitat recurrió a otra norma, el decreto ley de 1996 de promoción comercial de productos sanitarios, para justificar la multa que impuso al congreso del pasado mes de enero. Ese decreto establece que cualquier publicidad de productos o métodos que se presenten como “útiles” para diagnósticos y tratamientos deben ajustarse a “criterios de veracidad en lo que atañe a la salud”.
Sobre la gestión de las denuncias, Rams detalla que la comisión se limitará a detectar y supervisar los casos, que se remitirán luego al departamento de Salud para que sean sus técnicos los que evalúen si es merecedor de sanción.
Terapias fraudulentas más allá del cáncer
La Generalitat se focalizará en los remedios alternativos contra el cáncer por la gravedad que pueden conllevar a los pacientes, pero las pseudoterapias no solo abundan en el terreno de las enfermedades oncológicas. Frías recuerda en caso del MMS, la llamada Solución Mineral Milagrosa, un producto a base de clorito de sodio en solución acuosa que se vende en algunos casos como supuesta solución al autismo, aunque está perseguido por la Agencia Nacional del Medicamento.
Otros ámbitos en los que abundan remedios fraudulentos que pueden tener efectos negativos sobre la salud, según este abogado, son el de los suplementos para deportistas o el de los productos para combatir la alopecia.