Dos barceloneses han denunciado en los últimos quince días haber sido mordidos por un jabalí en la zona de la sierra de Collserola. El caso más reciente, dado a conocer por Betevé, es el de Xavier Bosch y su familia, de Nou Barris, que fueron atacados por uno de estos animales el pasado 12 de agosto, cerca del Parque de Atracciones del Tibidano.
Bosch, que ha denunciado al Ayuntamiento de Barcelona por el episodio, explica que subió a Collserola ese día con su mujer y sus hijos para ver la lluvia de estrellas de Sant Llorenç. Un grupo que estaba cerca de ellos empezó a dar de comer a los jabalís que se habían acerdado hasta el lugar y, al cabo de poco, estos se acercaron a ellos. “Estábamos rodeados, no sabíamos por donde movernos”, explica este hombre. “Vino uno y pensaba que iba a darme un golpe, pero me dio un mordisco impresionante”.
Tras el ataque, tuvo que ser atendido en Urgencias del Hospital Vall d’Hebron. Días después, decidió interponer la denuncia en el juzgado de guardia. “Mi objetivo es que los responsables de esto se pongan de acuerdo para tomar las medidas de control de la población excesiva de jabalís”, argumenta.
La convivencia entre los jabalís y los vecinosd de la zona de montaña de la capital catalana es desde hace años algo conflictiva. Según datos del Consorcio del Parque Natural de Collserola, la desnidad de población de estos animales, muchos de ellos híbridos de vietnamia, es muy elevada en la zona. Y a menudo bajan a la zona urbana en busca de comida. Desde hace años, la Generalitat autoriza batidas en la Zona de Caza Controlada y, si en 2018 capturaron 474 ejemplares, en 2019 fueron 746.
El caso de Bosch y su familia se suma al de una mujer que recibió el mordisco de un jabalí en el Mirador de Montbau. Ella optó por poner la denuncia contra el Parque Natural de Collserola.