Frente social por una educación en economía crítica en los centros educativos
“Después de todo el martirio que pasamos mis hijas y yo por la pérdida de nuestra vivienda, me niego y me parece vergonzoso que mis hijas aprendan a caer en la misma trampa”. Es el testimonio de Yolanda Yeste, miembro de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca y madre de dos adolescentes, con las que tuvo que sufrir un desahucio. Es una de tantas voces que se han alzado este martes contra el programa de Educación Financiera en las Escuelas de Catalunya (EFEC) impulsado en 2012 por la Generalitat, el Instituto de Estudios Financieros y diversas entidades bancarias.
El EFEC lleva a los institutos voluntarios, muchos de los cuales empleados o antiguos empleados de banca –pero también economistas o miembros del Instituto Catalán de Finanzas, según remarca la conselleria de Enseñanza–, para que impartan talleres sobre el mundo de las finanzas a estudiantes de 4º de ESO. “Se trata de que sepan cómo funciona un crédito si tienen que pedir uno para abrir un negocio, por ejemplo”, explican desde Enseñanza.
En cambio, la nueva Plataforma por una educación en economía crítica –integrada por entidades que van desde el sindicato de profesores USTEC o el sindicato de estudiantes SEPC, a organizaciones como la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, diversas ONG o la Xarxa d'Economia Solidària– denuncia que los contenidos “sólo aportan la visión del capitalismo financiero hegemónico, sin referencias a otras alternativas económicas”.
“Una forma de deformar es presentar como mecanismos muy sencillos lo que son mecanismos de la banca”, explica Xavier Montagut, profesor de secundaria y miembro de la plataforma. Denuncian que se den por supuestas algunas ideas. Por ejemplo, recogen de uno de los materiales didácticos el recorrido vital de una persona que compra un coche entre los 18 y los 25, compra un piso entre los 25 y los 40 y más tarde compra dos coches más y dispone de un plan de pensiones privado. Todo ello, denuncian, es hacer pasar un determinado modelo como el único.
Una visión naturalizada
“El currículo oculto es un entramado de sustrato que está por debajo, la gente no tiene conciencia y por lo tanto se va repitiendo”, denunciaba hace unos días la profesora Mercè Otero en una entrevista en El Diari de la Educació. Lo que busca la plataforma es impedir que esta visión de la economía se naturalice y defienden una economía crítica. “Las estudiantes queremos ser capaces de afrontar la realidad de forma crítica, y en cambio nos están enseñando una visión muy concreta, que dice que habrá que endeudarse para pagar unos estudios demasiado caros”, critica Estel Oleat, estudiante de secundaria y miembro del SEPC.
Oleat destaca que se presenta un modelo económico que criminaliza a las víctimas de la crisis por “no haber sido responsables”. Yeste, que ha vivido de primera mano los efectos de la crisis, asegura que “lo que deberían enseñar a nuestros hijos es quiénes han sido los responsables, los culpables de tener a día de hoy situaciones tan precarias”.
“¿Por qué quieren engañar a los jóvenes? ¿No les basta con los miles de millones de beneficios a costa de los abusos y engaños practicados hasta ahora?”, se pregunta la afectada. Le responde Miren Etxezarreta, catedrática jubilada de Economía y miembro del Seminario Taifa de economía crítica: “No les basta con lo que tienen, también quieren el futuro”, asegura. “Esto de educación financiera no tiene nada, es adoctrinamiento”, dice contundente. “Estamos a favor de una educación en economía crítica y plural, pero en contra de lo que se está haciendo”, apunta. Y este debate que ahora se encuentra en los institutos, Etxezarreta también lo ha abordado en la universidad, con la crítica a una visión única de la economía.
Desde el Departament de Enseñanza remarcan que los 300 institutos que ya están impartiendo estos talleres en 4º de ESO los piden voluntariamente entre la oferta que presentan Enseñanza, Economía y el Instituto de Estudios Financieros. Los voluntarios que los imparten, explica una portavoz, “reciben una formación previa y hacen un discurso homogéneo, en el que está garantizada la desvinculación ideológica”. Los impulsores de la plataforma lo cuestionan y critican que se quiera hacer pasar por neutral un discurso que no lo es. Durante el próximo mes recogerán firmas para reclamarle a la consejera Meritxell Ruiz la retirada de este programa y el trabajo para “incorporar las perspectivas de economía crítica y plural en los currículos de educación y los materiales didácticos”.