Las entidades se concentran para hacer definitivo el cierre temporal del CIE de Barcelona
“Cerraremos, cerraremos los centros de internamiento”. Con este grito iniciaban la asamblea ciudadana los participantes concentrados en la plaza Sant Jaume de Barcelona el viernes por la tarde. Las entidades, entre ellas, Tanquem els CIEs, Migrastudium, SOS Racisme, Papeles y Derechos para Todos y Stop Mare Mortum han reunido más de un centenar de personas para discutir sobre posibles movilizaciones a desarrollar durante los próximos tres meses mientras el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca permanece cerrado. Las diversas acciones van encaminadas a evitar que el centro reabra las puertas una vez finalice su rehabilitación el próximo febrero, según está previsto.
El Ministerio del Interior informaba hace poco más de una semana del cierre del CIE de la Zona Franca en Barcelona para llevar a cabo una serie de reformas, con la previsión de reabrirlo en febrero de 2016. La decisión llegaba tras varios autos del juez de Barcelona que pedía una serie de reformas.
“Los CIE son una violación de los derechos humanos en sí mismos”, ha manifestado una de las portavoces que ha pedido que el centro de Barcelona no vuelva a abrir nunca más las puertas y que cierren el resto de centros de internamiento de todo el estado.
Marc Serra, uno de los portavoces de la plataforma Tanquem els CIEs ha explicado que pondrán en marcha una campaña para pedir a las ciudades que se proclamen libres de centros de internamiento de extranjeros, una iniciativa que presentarán al Ayuntamiento de Barcelona durante las próximas semanas y que espera que aprueben.
También instan al nuevo gobierno de la Generalitat a desobedecer la ley de extranjería estatal y piden que uno de los ejes de soberanía sea precisamente desobedecer esta ley. Por otro lado Serra ha explicado que tienen previsto reunirse con los partidos que se presentan a las elecciones del veinte de diciembre para pedirles que se posicionen y que incluyan el cierre de los CIEs en sus programas.
Entre las distintas ideas que se han discutido a lo largo de la asamblea ha salido la de ocupar el centro, y la de organizar una gran manifestación que intente mover un gran número de ciudadanos.
¿Por qué cierra el CIE de Barcelona?
El CIE de Barcelona, según la información del Ministerio del Interior, cierra las puertas antes de noviembre para llevar a cabo una serie de reformas y reabrirá en febrero de 2016.
Desde la plataforma Tanquem els CIEs atribuyen el cierre a una reacción del ministerio por la presión de la ciudadanía que según ellos arranca en enero de 2014 con el primer auto del juez de control del CIE de Barcelona que pedía eliminar las mamparas que impedían el contacto físico entre internos e incorporar aseos dentro del las celdas, entre otras medidas.
Desde esta plataforma explican que las quejas de varias organizaciones de la sociedad civil, tras varias visitas al centro, son las que motivaban al juez a pedir una serie de reformas. Como ejemplo, explican que a mediados de junio presentaron una queja en que denunciaban que algunas medidas impuestas en el primer auto de enero aún no se habían llevado a cabo. Esto impulsó un nuevo auto donde además el magistrado del juzgado de instrucción número 1 de Barcelona ordenaba que se permitiera la utilización de teléfonos móviles y que no se retiraran los relojes a los inmigrantes. El mismo auto también obligaba a que se proporcione atención sanitaria a todos los internos independientemente de que tengan o no tarjeta sanitaria.
¿Qué pasará con los internos?
Desde hace unos meses este centro, y en previsión del cierre, ya no acogía el internamiento de nuevos inmigrantes. Algunos de los internos que hasta ese momento estaban dentro quedarán en libertad. Serán aquellos que ya han pasado el plazo máximo de internamiento, que saldrán del centro pero con una orden de expulsión o bien aquellos que finalmente han conseguido el asilo.
Desde Tanquem els CIEs recuerdan que más de la mitad de los internos son liberados del centro pero salen sin permiso de residencia. “No los pueden deportar pero no regularizan su situación”, denuncian desde la plataforma ciudadana.
El resto de internos que no son puestos en libertad han sido trasladados al CIE de Valencia o Madrid, lo que supone, dicen desde Tanquem els CIEs, un “prejuicio muy grande porque vulnera el derecho a la asistencia letrada”, imposibilitando la comunicación entre el abogado y el interno, ya que el defensor no puede desplazarse a otras ciudades.
Los desplazamientos también suponen un sufrimiento añadido a las familias de Catalunya que tendrán que desplazarse para visitar a su familiar, denuncia Serra. Precisamente hay internos que antes de ser encerrados en el centro llevaban años en el país y habían formado sus familias, y otros habían venido atraídos por familiares suyos que ya vivían aquí.
“Para nosotros la solución no es el cierre del CIE de Barcelona sino de todos los CIEs del estado”, dice Serra a Catalunya Plural.
Las entidades han convocado a los ciudadanos el próximo martes a las 19 horas en la sede de SOS Racismo para acabar de desarrollar las posibles acciones a llevar a cabo durante estos tres meses y establecer un calendario que permita cerrar el CIE de la Zona Franca de forma definitiva.