Buen resultado para todos los partidos independentistas y refuerzo de la mayoría partidaria de la secesión tanto en representación como en votos. Esta es la fotografía electoral que dibuja este viernes la nueva encuesta del Centre d'Estudis d'Opinió (CEO), organismo de la Generalitat, en un sondeo que sigue la línea de los anteriores y que pronostica que ERC ganará unas elecciones al Parlament por primera vez desde la segunda república.
La encuesta sitúa a los republicanos de Pere Aragonès en 35 escaños, una ventaja holgada respecto a Junts, que queda segundo con entre 30 y 32. La formación de Carles Puigdemont ha visto crecer sus expectativas respecto a las últimas encuestas y nota un ascenso de votos después de haber elegido a Laura Borràs como su candidata a la presidencia. De esta forma, los independentistas de centro-derecha consiguen atarse a la segunda posición y alejarse de un PSC que quiere disputar este puesto.
Los socialistas, sin embargo, no acaban de despegar, y se mantienen en los 25 asientos en la Cámara. Un pronóstico que, de cumplirse, sería un buen resultado para Miquel Iceta, pues mejoraría de forma clara sus representantes actuales. En el otro extremo se sitúa Ciudadanos, partido que según la mayoría de encuestas puede convertirse en el gran perdedor de la noche del 14 de febrero. En esta edición del CEO, Cs queda con entre 14 y 16 diputados, lejos de los 36 que obtuvo en 2017, cuando ganó las elecciones.
En las siguientes posiciones, tres formaciones aparecen casi empatadas: la CUP, con entre 8 y 9 escaños, y los 'comuns' y el PP, que rondan ambas entre los 7 y los 9. El crecimiento de los anticapitalistas impulsa además al bloque independentista, para quien el CEO pronostica un mínimo de 73 representantes y un máximo de 76, es decir, una mayoría absoluta holgada y un récord para los secesionistas. En el mismo sentido, el independentismo superaría por primera vez el 50% del voto, una frontera que ha sido esgrimida por diferentes partidos como meta.
La encuesta reduce sensiblemente las expectativas de Vox, para quien pronostica entre 4 y 6 diputados. Como ya ocurrió en la última edición, tampoco firma la entrada del PDeCAT en la Cámara, aunque sí le deja con un pie dentro. Según e CEO los herederos de Convergència tienen una proyección de voto del 1,9%, aún lejos de la barrera del 3% que les permitiría entrar.