Pedro Sánchez sigue en el centro de la campaña catalana. ERC y Junts han elevado el tono este sábado y han arremetido contra el presidente del Gobierno, que además del apoyo de la calle Ferraz de Madrid ha recibido un nuevo espaldarazo por parte del expresidente José Luís Rodríguez Zapatero. “Pedro, hay que seguir”, ha pedido el también exsecretario general del PSOE desde Tarragona.
La reflexión sobre su continuidad en el cargo que el miércoles lanzó Sánchez ha cambiado el guion previsto de la campaña catalana. Junts pretendía centrarla en el expresident y su regreso; el PSC, en la gestión y los servicios públicos tras una década de procés; y ERC, en intentar hacerse un hueco en la pugna entre Puigdemont e Illa. Pero los planes saltaron por los aires con la carta, que ha situado a Sánchez como protagonista de los primeros compases de la campaña.
El parón en su agenda ha hecho que Sánchez, cuya presencia en los actos de campaña era una de las apuestas del PSC para la campaña, no acudiera el jueves a Sabadell ni este domingo a Santa Coloma de Gramenet. Este sábado, a falta de Sánchez e Illa (que se encontraba en Ferraz), el expresidente del Gobierno José Luís Rodríguez Zapatero, también muy implicado en la campaña catalana, ha sido el cabeza de cartel en Tarragona.
“Tenemos 48 horas para impulsar a Illa como president y para que Pedro siga en la Moncloa con Begoña, que es donde le queremos”, ha expresado Zapatero, que ha animado al actual líder del PSOE a mantenerse en el puesto. “Hay que seguir”, ha insistido el expresidente, que ha apoyado sin ambages las políticas progresistas desplegadas por el Ejecutivo de Sánchez.
“Pedro, hay que seguir para reconocer al Estado palestino, para seguir subiendo el Salario Mínimo, para decir a la banca y a las eléctricas que ahora toca un impuesto extraordinario porque han tenido muchos beneficios”, ha aseverado Zapatero, que ha recordado lo que está en juego: “Un Gobierno que no dependa de ningún poder, sino solo del voto”.
Además de defender los avances progresistas del Ejecutivo de Sánchez, Zapatero ha cargado contra el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, la extrema derecha y los obispos conservadores por sus ataques al Ejecutivo al denunciar su “hipocresía” cuando llaman a “respetar a la familia”.
“Todos esos obispos que salieron a manifestarse contra la ley de matrimonio igualitario porque destruíamos la familia, pues podría salir alguno ahora a decir que respeten a la familia de Pedro Sánchez”, ha enfatizado.
ERC y Junts, contra Sánchez
Todos los apoyos brindados por los socialistas han sido reproches en los actos de este sábado de los independentistas. El más contundente ha sido el candidato de Junts, Carles Puigdemont, quien ha acusado al presidente de “pretender españolizar la campaña y confundir” a los catalanes. “Nos quieren hacer creer que esto va de Pedro Sánchez y el PSOE en vez de la independencia y los trenes”.
Visiblemente enfadado, Puigdemont ha remachado: “Digamos 'no', que esto no va del futuro de PSOE sino del futuro de nuestros hijos. ¿Qué se han creído? ¡Ya basta!”.
No solo ha sido Sánchez. Puigdemont también ha repartido contra el candidato socialista a la Generalitat, Salvador Illa, por haber acudido este sábado al Comité Federal de apoyo al presidente y secretario general del PSOE. Según el líder de Junts, Illa “ha preferido ir a recoger las instrucciones del PSOE que explicar su propuesta para Catalunya”. “Con nosotros, esto no pasará”, ha apostillado.
Por su lado, ERC ha puesto en el mismo saco del personalismo a Sánchez y a Puigdemont. Lo ha hecho el presidente del partido, Oriol Junqueras, durante un acto en L'Hospitalet. “Catalunya no merece a políticos que centren su actividad en ellos mismos o en sus dudas, miedos y malestares personales”, ha criticado Junqueras, que ha señalado a Pere Aragonès como “el presidente que merece la sociedad catalana” porque, ha dicho, “no está inquieto solo por sí mismo sino por las escuelas, el trabajo y el país”.
El candidato republicano a la presidencia ha centrado sus ataques en Illa, de quien ha puesto en duda que no quiera aceptar los votos del PP para ser investido: “Por sus hechos les conoceréis. Debemos hacer que no sea posible”.