La fiscal del caso Raval pide 11 años de cárcel para seis de los agentes de los Mossos d'Esquadra que con su intervención provocaron la muerte de Juan Andrés Benítez el pasado 5 de octubre de 2013, hace casi un año. En su escrito de calificación, el ministerio público les acusa de delitos de homicidio y contra la integridad moral.
La fiscalía solicita también un año y medio de cárcel para otros dos agentes imputados, por obstrucción a la justicia, y pide finalmente el sobreseimiento para otros dos mossos restantes. Juan Andrés Benítez, vecino del Raval, murió tras un paro cardíaco provocado entre otras causas por una violenta detención llevada a cabo por estos agentes, que le redujeron al suelo en plena calle y le golpearon con puñetazos y patadas pese a sus gritos de dolor.
La Audiencia de Barcelona ya dejó claro, en un auto remitido a la defensa, que la actuación de los mossos fue una de las causas de su muerte. El “excesivo uso de la fuerza” empleado por los agentes, “no solo en cuanto a la intensidad sino también a la extensión temporal”, fue uno de los factores que provocó el paro cardíaco de Benítez, según el juez.
También intervinieron otros dos factores, como el consumo de cocaína por parte de la víctima -aunque en aquel momento las cantidades encontradas en su cuerpo eran mínimas-, y una enfermedad cardíaca. Sin embargo un informe médico encargado por la familia descartó recientemente que ambas cosas pudieran considerarse causas.
Manifestación un año después
Precisamente este domingo 5 de octubre hará un año de la muerte de Benítez, por lo que la plataforma Justicia Juan Andrés convoca una manifestación a las 18:30 en el barrio del Raval. Los vecinos del barrio consideran, en el texto de convocatoria, que “esta muerte es consecuencia de las estrategias de represión y estigmatización de nuestro barrio para favorecer la renovación de vecinos y atraer otros nuevos con mayor poder adquisitivo, que encajen con la llamada Marca Barcelona”.
En esta línea, llaman a ocupar un solar de la calle Aurora con el objetivo de rehabilitarlo y ponerlo a disposición del barrio. “Liberar este emplazamiento concreto no es casual. Está justo en la calle en el que asesinaron a nuestro vecino, además de estar actualmente embargado por el Ayuntamiento de Barcelona e hipotecado por la Sareb (”banco malo“), que ha sido constituida con dinero público”, explican.
Con el espacio, que quieren llamar Ágora Juan Andrés Benítez, aseguran que “el reclamo por Juan Andrés se mantiene vivo, a la vez que se regenera un espacio para el uso de la comunidad, de los que habitamos en esta ciudad, en este barrio”.