El 11 de septiembre de 2013, Lorena Roldán (Tarragona, 1981) se puso una barretina y se fue a la llamada vía catalana, una cadena humana de más de 400 kilómetros organizada por la ANC para reclamar la independencia durante la Diada. Unos meses después, Roldán se afiliaba a Ciudadanos y empezaba uno de los ascensos más fulgurantes que se recuerdan en el partido.
Roldán trabajaba en ese momento en los servicios jurídicos de la Diputación de Tarragona y, según ha repetido en decenas de ocasiones, acudió a la manifestación independentista presionada por sus superiores. En su partido, donde el episodio generó recelos, utilizan el ejemplo para destacar su capacidad de resistencia y adaptación. “Si después de esa foto consigue ser la candidata de Ciudadanos a la Generalitat, imagínate de lo que es capaz”, precisan desde el Parlament.
Roldán es la elegida por Albert Rivera para sustituir a Inés Arrimadas y confirma así su meteórica carrera. Un año después de afiliarse a Ciudadanos se había convertido en edil de Tarragona tras las municipales de mayo de 2015. Cuatro meses después abandonó el consistorio de su ciudad, llegó a la Cámara catalana como diputada por su provincia y empezó a medrar en el grupo parlamentario. En 2018 fue elegida senadora por designación autonómica y Rivera la nombró portavoz del partido en la Cámara Alta.
Aficionada a la repostería y al senderismo, Roldán fue votante del PSC hasta que se desencantó con los socialistas por su acercamiento a ERC durante el tripartito. A pesar de que en el pasado se decantó por opciones progresistas, nadie en Ciudadanos la enmarca en el sector socialdemócrata de la formación. Hija única, su madre nació en Cádiz y sus abuelos paternos son asturianos.
La diputada se enfrenta a un reto significativo tras haberse impuesto en unas primarias sin oposición real. Deberá comandar la formación naranja en un momento en que las encuestas van a la baja y el PSC al alza, el partido ha perdido votos y con la sentencia a los líderes independentistas a la vuelta de la esquina. Los retos también son internos: los ánimos en el grupo parlamentario están bajos y la sombra de su antecesora, con la que le unen muchos aspectos, es todavía muy alargada.
La alargada sombra de Arrimadas
Licenciada en Derecho, nacida en el 81, sin haber militado en ningún partido de joven… Las similitudes entre Roldán y Arrimadas son patentes. Sus compañeros destacan que ambas comparten también la capacidad de trabajo y una timidez en privado que se convierte en un estilo agresivo en público.
La belicosidad de Roldán, siguiendo el estilo de otros líderes de su partido, se pudo ver el miércoles durante un pleno en el Parlament. Era el estreno de Roldán en la Cámara catalana desde que se postuló a ser la próxima candidata de Ciudadanos a la Generalitat y la diputada acusó al president, Quim Torra, de ser incapaz de “empatizar lo más mínimo” con una mujer que sufre un cáncer de mama. La esposa de Torra padece cáncer y la diputada tuvo que disculparse en privado al acabar el pleno.
Son tantas las similitudes entre Roldán y Arrimadas que en el partido creen que Rivera ha querido repetir con ella la exitosa operación que llevó a cabo para las autonómicas de septiembre de 2015: tras su marcha al Congreso, una desconocida Arrimadas consiguió superar sus resultados y Ciudadanos pasó de 9 a 25 escaños en la Cámara catalana.
“Lorena lo tendrá mucho más difícil”, matizan desde el grupo parlamentario, donde no todos tienen claro que la operación vaya a tener tanto éxito como la de Arrimadas. No eran pocos los diputados que preferían que el candidato fuese el actual presidente del grupo parlamentario, Carlos Carrizosa, que rechazó presentarse a las primarias para no enfrentarse a Rivera. “Repetir la victoria de 2017 será muy complicado”, reconocen en el partido. Las mismas fuentes señalan que Ciudadanos, en ese momento, pudo capitalizar mejor que nadie los votos contrarios al independentismo por la proximidad de esos comicios con el 1 de octubre.
El estreno en el Tívoli
Fue precisamente durante esa campaña cuando Rivera se fijó en el potencial de Roldán, cuyo ascenso en el partido ya era comentado por algunos diputados en Catalunya. El 19 de noviembre de 2017, durante un acto de presentación de las listas de Ciudadanos en el Teatro Tívoli, Roldán se hizo notar.
Sin fallos y sin leer ningún papel, la diputada se encargó de presentar un acto en el que fueron hablando los cabezas de lista de todas las provincias. En el partido recuerdan como Rivera, sentado en primera fila junto a Francesc de Carreras -considerado su padre político, ahora fuera de la formación- no paró de comentar lo bien que lo había hecho esa desconocida diputada.
Roldán multiplicó entonces sus apariciones en los medios y empezó a protagonizar algunos actos de tamaño medio por Catalunya. La decisión de Arrimadas de marcharse al Congreso puso todos los focos en ella y ya el pasado marzo algunos medios la apuntaron como su sucesora. No fue así y Rivera encargó a su amigo personal, Carlos Carrizosa, comandar la transición en Catalunya nombrándole líder de la oposición. Roldán se conformó con el cargo de portavoz en el Parlament, que compaginaba con la portavocía en el Senado.
La ascendencia de Roldán era cada vez mayor y Carrizosa se batía en retirada, consciente de la provisionalidad de su liderazgo. El presidente de la formación naranja hablaba de Roldán como la “senadora revelación” y convencía a su entorno del potencial que tenía la diputada de Tarragona. Tras imponerse sin problemas en las primarias, Roldán tendrá que demostrar ahora que Rivera no estaba equivocado.