La Generalitat gestionará de forma directa 900 millones de euros en materia de infraestructuras que el Estado tenía previsto invertir en Catalunya. Es el acuerdo que ha firmado ERC con los partidos del Gobierno, PSOE y Unidas Podemos, a través de varias enmiendas transaccionales a los Presupuestos Generales, y que si bien no suponen el apoyo definitivo de los republicanos a las cuentas, sí dejan el acuerdo final a falta de los últimos detalles.
“Todavía queda camino por recorrer hasta poder alcanzar un acuerdo definitivo”, han afirmado desde Esquerra, evitando dar aún por hecho el sí final a los Presupuestos. Con todo, este jueves se votarán definitivamente las cuentas y, después de las enmiendas conjuntas registradas este martes, nadie cree que ERC pueda rechazar la ley. El sí de los independentistas catalanes sería además el último necesario para el Gobierno, después de que en los últimos días se hayan anunciado acuerdos con el PNV, Bildu y el PDeCAT.
Las enmiendas suponen la creación de un mecanismo que debe garantizar que se ejecutan las inversiones del Estado en Catalunya. Para ello, el acuerdo alcanzando es que el Estado transfiera a la Generalitat una parte de los fondos previstos para realizar obras en infraestructuras claves, como son obras de mejoras ferroviarias y de autovías. En total serán unos 900 millones de euros plurianuales, que tendrán como destino proyectos finalistas pero que se ejecutarán desde la Generalitat.
Entre los convenios firmados se encuentran la ejecución de las mejoras de la AP2 y la AP7, dos vías que habían sufrido graves problemas de congestión desde que cayeron sus peajes, a lo largo de los últimos dos años. Para estas autopistas habrá una aportación plurianual de 250M de euros. También se ha acordado un fondo para las actuaciones en la N-II, en la zona del Maresme, con una aportación del Estado de 384 millones de euros a lo largo de varios años.
Además, según la información facilitada por ERC, se firmará un convenio para la ejecución del Eix Pirinenc con una partida plurianual de 260 millones. Por último, se ha firmado también un acuerdo para la ejecución de intercambiadores entre la red ferroviaria de titularidad estatal (ADIF) y la de la Generalitat (FGC).
La ejecución de las inversiones había sido uno de los caballos de batalla de ERC y del conjunto del soberanismo catalán en los últimos años, después de que el grado de inversión real sobre los presupuestos pactados se quedasen lejos de los de otras comunidades autónomas. Si se toma el último año consolidado, 2021, las inversiones presupuestas entonces por el Estado en Catalunya ascendieron a 2.068 millones de euros, pero finalmente se quedaron en una ejecución de 740, siendo la comunidad que más lejos quedó del objetivo.
“El establecimiento de este mecanismo para garantizar las inversiones del Estado en Catalunya es una gran conquista para corregir la desinversión histórica que sufren los catalanes y catalanas”, ha afirmado el portavoz de Presupuestos de los republicanos en el Congreso, Joan Margall, según la nota de prensa distribuida por los republicanos. “Queremos más herramientas como país para ayudar a la gente, para hacerle la vida más fácil. Cualquier espacio de soberanía que conquistamos es un paso adelante”, ha dicho.