El Hospital Vall d'Hebron de Barcelona impide las visitas a cualquier ingresado salvo para despedirse de familiares

Confinamiento prácticamente total en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, uno de los mayores centros sanitarios de Catalunya con 1.100 camas. El comité de dirección ha acordado que a partir de este viernes se prohibirán las visitas a pacientes ingresados, salvo que sea para despedirse de alguno de ellos que esté a punto de morir, o en el caso de niños y mujeres que han dado a luz.

“Esta decisión responde a la situación de excepcionalidad que vivimos, aunque somos conscientes de las consecuencias emocionales que puede conllevar para pacientes, familiares y personal sanitario”, ha informado el hospital, que asegura que ha tomado la decisión tras consultar el Comité de Ética Asistencial.

Así pues, quedarán cerrados a personal externo los edificios del Hospital General y del Hospital de Traumatología, Rehabilitación y Quemados. La “única excepción” en estos casos será para los pacientes que estén al final de la vida, a los que se dejará recibir la visita de un familiar. Para el resto de ingresados, aseguran que activarán un sistema de voluntarios para facilitar la comunicación con sus familiares.

Fuentes del Instituto Catalán de la Salud (ICS), que gestiona los ocho grandes hospitales de Catalunya, detallan que esta es una decisión que van a tomar los demás centros sanitarios en los próximos días. Otros de los que ya lo han hecho son el Germans Trias i Pujol, de Badalona, y el Universitari de Bellvitge, de l'Hospitalet.