Jordi Pujol se somete este viernes al interrogatorio del Parlament de Catalunya sobre su dinero sin declarar en el extranjero. A partir de las 16.00, cuando se inicia la comparecencia en la Comisión de Asuntos Institucionales, los partidos tratarán de resolver todos los interrogantes que ha despertado su escueta confesión del 25 de julio.
Nada hace pensar, sin embargo, que el president de la Generalitat durante 23 años se decida a aportar más información sobre el caso si no lo ha hecho en los últimos dos meses. Todo lo que ha reconocido Pujol es que su padre, Florenci, dejó a su mujer, Marta Ferrusola, y a sus siete hijos, un dinero en un banco extranjero sin regularizar, y que estuvieron gestionados por una persona de confianza hasta que todos los hijos cumplieron la mayoría de edad.
Pero el relato no explica a cuánto ascendía la herencia, en qué entidad estaba depositada o qué relación ha llegado a tener este dinero con la fortuna amasada por los hijos, el mayor de los cuales, Jordi Pujol Ferrusola, ha desfilado recientemente por la Audiencia Nacional para esclarecer un supuesto caso de blanqueo de capitales. A continuación exponemos los principales puntos oscuros de la confesión del expresidente.
1. ¿Cuál es el verdadero origen del dinero?
Pujol ha atribuido el origen de la fortuna no declarada a un dinero que su padre siempre había tenido en el extranjero y que no figuraban en su testamento. Esta versión se tambalea desde el momento en que su única hermana, Maria Pujol Soley, admite -por boca de su marido, Francisco Cabana- no tener la más mínima idea de qué herencia no declarada se trata. En especial teniendo en cuenta que cuando el padre de Pujol murió en 1980 quien cuidó a la madre fue su hermana y no él.
Dice Pujol que su padre dispuso “como última voluntad específica” que ese dinero fuera para sus nietos (los hijos del matrimonio Pujol-Ferrusola) y su esposa. ¿Esa voluntad fue verbal? ¿Tiene un documento que pueda acreditarlo? El origen de la herencia es poco creíble, mientras que otros posibles orígenes -fondos extraídos de Banca Catalana antes de la intervención o comisiones ilegales de obras públicas- lo son mucho más. Pero Pujol ha de aferrarse a su primera versión.
2. ¿De qué importe era la supuesta herencia del padre?
A pesar de las cifras que se han ido publicando sobre la fortuna oculta de los Pujol, ninguna es oficial ni está confirmada. En su confesión, Jordi Pujol evitó dar una cifra concreta del dinero de la supuesta herencia. Es evidente que no se trató de una omisión casual, ya que por fuerza tiene que saber cuánto dinero le dejó su padre, aunque escribiera en el comunicado que del dinero no quiso saber “ni el más mínimo detalle”.
Es probable que si ha ocultado este dato es más bien porque desconoce cuánto dinero de procedencia dudosa de sus hijos habrá que justificar con la herencia. Pujol no quiere repetir tampoco el error de Fèlix Millet, que en su confesión inicial dio la cifra de tres millones de euros expoliados del Palau de la Música, un montante que con el tiempo se multiplicó por 10 y hizo que Millet quedara como mentiroso, además de ladrón.
3. ¿Tienen Pujol y su esposa dinero o propiedades en el extranjero?
Es lo primero que debería aclarar Pujol. Ha confesado que la familia ha tenido dinero oculto durante más de 30 años, y dice que es el que sus hijos se han visto obligados a regularizar este verano, pagando elevadas multas. Pero hasta la fecha en ningún momento ha negado que tenga más dinero -o patrimonio- en el extranjero.
4. ¿Todos sus hijos han regularizado sus deudas con Hacienda?
La herencia oculta, según dice Pujol en la carta de confesión, era para Marta Ferrusola y los siete hijos de la pareja, pero sólo se sabe que cinco de ellos, además de la madre, se han puesto al día con Hacienda. Faltan dos, de los que no hay noticia de que lo hayan hecho, que son Jordi Pujol Ferrusola y Oriol Pujol Ferrusola, casualmente los dos que tienen más problemas judiciales en estos momentos. El primero está imputado por blanqueo a raíz de las declaraciones de su exnovia Victoria Álvarez y el segundo lo está por tráfico de influencias en el caso de las ITV.
5. ¿Dónde ha tenido guardado el dinero?
Otra omisión intencionada ha sido no precisar ni dónde tenía su padre guardado el dinero ni dónde lo ha tenido él todos estos años, si bien la prensa ha publicado que originalmente estuvo en Suiza y posteriormente en Andorra (primero en la Banca Reig y luego en la Banca Privada de Andorra). Pujol, sin embargo, ha seguido la estrategia de evitar dar más detalles de los estrictamente necesarios. De esta manera consigue que si la investigación policial encuentra más dinero de la familia Pujol en otros paraísos fiscales, no puedan acusarle de haberlo ocultado.
6. ¿Quién era o es la persona de confianza que le administró la herencia?
Otro de los interrogantes que quedan en el aire después de la confesión del 25 de julio es quién es la persona “de su máxima confianza” a quien encargó la gestión de este dinero hasta que un hijo se hizo cargo. Ha corrido bastante el rumor de que se trataba del padre de Artur Mas, Artur Mas Barnet, a quien se le encontró una cuenta en Liechtenstein, si bien esta eventualidad concuerda poco con la trayectoria política del hoy presidente, que hizo amistad con Jordi Pujol Jr. a finales de los ochenta cuando ambos trabajan para el grupo Tipel, de la familia Prenafeta. Antes no hay evidencias de que los Mas y los Pujol tuvieran ninguna relación, y menos tan estrecha.
Otro nombre que suena es el de Carles Sumarroca Coixet, cofundador de CDC y hombre clave del sector negocios de Convergència, con quien Pujol mantenía una estrecha amistad desde los setenta o antes. Pero podría ser cualquier otro. Sea quien sea, Pujol evitará añadir nuevas pistas a la sospecha de corrupción generalizada que se cierne sobre todo su mandato.
7. ¿Por qué ha esperado hasta ahora para confesar?
El expresident confesó su irregularidad fiscal 34 años después de recibir la herencia. Según fuentes cercanas a la familia, la admisión vino motivada por una información publicada el 7 de julio en el diario El Mundo, donde se revelaba que Marta Ferrusola y cuatro de sus hijos, Marta, Pere, Maria y Josep, habían realizado 11 ingresos por valor de 3,4 millones de euros en 2010 en la Banca Privada de Andorra. Las investigaciones sobre los hermanos Jordi o Oriol hasta entonces no habían hecho tambalear el clan, pero esa noticia amenazaba con sentar en el banquillo a toda la familia. Entre el 7 y el 12 de julio, Pujol se puso en manos del prestigioso abogado Cristóbal Martell para poner en marcha su defensa.
8. ¿Sabía que su hijo ha intermediado con contratistas de obra de la Generalitat?
La pregunta se puede formular de mil maneras, pero al final la respuesta de Pujol será la misma. En todo lo relativo a las sospechas sobre un sistema organizado de cobro comisiones ilegales para la adjudicación de obra pública, con Jordi Pujol Ferrusola como epicentro, el expresident evitará salirse del guión escrito por el abogado Cristóbal Martell.
Por lo tanto, puede que solo repita lo mismo que su hijo en la Audiencia Nacional: que la mayor parte de operaciones en las que imtervino Jordi Jr. tuvieron lugar durante los años del tripartito, o con ayuntamientos socialistas, y con compañeros de viaje tan poco -o tan- sospechosos como el marido de María Dolores de Cospedal o el hijo de Marcelino Oreja.
Pujol no puede negar que su hijo ha ganado dinero haciendo tareas de consultoría para contratistas de obra de la Generalitat, incluso en los tiempos en que él mismo la presidía, pero ante esto puede defender el derecho de cualquier persona a ganarse la vida y acaso insista en que su hijo ha hecho negocios con todo tipo de empresas que trabajan con todo tipo de administraciones y que en ningún caso sus honorarios corresponden a comisiones por una hipotética labor de conseguidor.
9. ¿Aplazó su comparecencia en el Parlament para evitar declarar antes de que su hijo?
El pleno del Parlament solicitó el día 2 de septiembre la comparecencia de Pujol, con la intención de que el expresident acudiera a la Cámara esa misma semana. Pero Pujol pidió hacerlo pasado el 22 de septiembre. ¿Por qué? La versión del expresident es que no quería que sus declaraciones influyeran negativamente en las fechas clave del proceso soberanista -la Diada y el debate de política general-, pero fuentes cercanas a la defensa aseguraron que lo que intentaba evitar era influir en la declaración de su primogénito, que compareció ante el juez Ruz en la Audiencia Nacional el 15 de septiembre.
10. ¿Qué grado de conocimiento había en CDC del dinero en el extranjero?
Hasta ahora Jordi Pujol ha planteado su irregularidad como un asunto personal, y así lo consideró también el presidente Artur Mas en su primera valoración de la confesión. “Es un tema que no tiene relación ni con el Govern de Catalunya ni con Convergència”, declaró Mas. Pero si se demostrara que el dinero no es de ninguna herencia, habría que indagar las complicidades del clan Pujol con otros actores políticos y empresariales. Si la familia ingresó dinero proveniente de comisiones -y derivó una parte para financiar el partido-, de acuerdo con la célebre acusación del 3%, es otro de los interrogantes que difícilmente Pujol responderá hoy.