Joan Laporta volverá a ser presidente del Barça once años después. Su candidatura se ha impuesto con holgura este domingo a las de Víctor Font y Toni Freixa, de acuerdo con el recuento hecho público por el club. Con todos los votos contados, ha sumado el 54,3% de las papeletas, en total 30.184, por el 30% de Font y el 8,6% de Freixa.
Laporta fue presidente entre 2003 y 2010, dando inicio a una de las épocas más laureadas del club, con la elección de Josep Guardiola como entrenador y la eclosión de Messi. Abogado de profesión e independentista declarado –llegó a ser concejal en Barcelona y diputado en el Parlament–, Laporta representaba la opción más contrapuesta al legado de Bartomeu y su predecesor, Sandro Rosell.
La votación, a la que estaban llamados 110.290 socios –aunque 20.663 lo hicieron anticipadamente por correo–, se ha desarrollado sin incidentes desde las 9.00 hasta las 21.00. Como novedad, además de las sedes electorales del Camp Nou y el Palau Blaugrana, en Barcelona, había otros puntos de votación en Girona, Lleida, Tarragona, Tortosa y Andorra, con la particularidad de que no estaba permitido saltarse el confinamiento comarcal para acudir a las urnas.
Entre los retos que deberá abordar su nueva junta, y que ya protagonizaron los debates durante la campaña, están la importante deuda económica del club –1.173 millones de euros, de los que 730 vencen a corto plazo–, el futuro inmediato a nivel deportivo del primer equipo de fútbol, el incierto horizonte de la estrella Leo Messi y la remodelación del Camp Nou y su entorno, el llamado ‘Espai Barça’, que requiere de una fuerte inversión por parte de la entidad azulgrana pese a su mala situación financiera.
El equipo que forme Laporta sustituirá a la que encabezó Josep Maria Bartomeu entre 2015 y octubre de 2020. Hace cuatro meses, el presidente y su directiva dimitieron en bloque tras una exitosa moción de censura y dieron paso a una Comisión Gestora, que ha manejado el club hasta hoy.
Bartomeu y otros directivos de su etapa fueron detenidos por los Mossos d’Esquadra esta misma semana por presuntos delitos de administración desleal y corrupción entre particulares. Es lo que se conoce como ‘Barçagate’, la operación por la que el club encargó a una empresa, I3Ventures, una campaña en redes de desprestigio de sus rivales.