El expresidente de ERC Oriol Junqueras ha desmentido “absolutamente” que él esté detrás del muñeco que apareció colgado de un puente de su localidad, Sant Vicenç dels Horts, en 2019. En plena polémica por las acciones de propaganda de falsa bandera del partido, figuras como Ernest Maragall insinuaron que esta salió del entorno del propio exvicepresident.
Junqueras lo ha rechazado de plano. “Cómo de injusto debe ser atribuir a alguien que mientras estaba en un juicio con sesiones de 10 horas al día [en referencia al del procés] decida colgarse un muñeco de sí mismo y hacerlo de tal forma que lo vean sus propios hijos”, ha respondido en una entrevista en Catalunya Ràdio. Para Junqueras, insinuar este tipo de cosas está “fuera de lugar”. “No sólo es inmoral sino muy poco racional”, ha añadido.
El expresidente de la formación, que ahora aspira a regresar al cargo, considera que no debería hacer falta que tenga que desmentir estar detrás del muñeco. “Si alguien es padre, se hace cargo de que es imposible que a alguien se le ocurra algo así. ¿Qué ganancia teníamos que esperar de algo de este tipo?”, ha preguntado después que tanto el exdirigente de ERC Xavier Vendrell como Maragall dejaran entrever que la acción del muñeco salía de la misma localidad de Sant Vicenç dels Horts.
Tras las acusaciones que le situaban en el monasterio de Montserrat el 27 de octubre de 2017, el día de la Declaración Unilateral de Independencia en el Parlament, Junqueras ha asegurado que no faltó a “ninguna de sus obligaciones” durante ese periodo. En este sentido, ha defendido que el 30 de octubre acudió a su conselleria de Economía y al Parlament remarcando que fue “el único miembro” del Govern que lo hizo. Sobre ese día en concreto, ha respondido que estuvo haciendo el trabajo que le correspondía para intentar encontrar tantos apoyos internacionales como fuera posible. No ha querido concretar sin embargo si ese día estaba en el monasterio de Montserrat, tal y como aseguró Vendrell, porque, según dijo, el lugar es “irrelevante”.
En cuanto a los carteles difamatorios sobre los hermanos Pasqual y Ernest Maragall, ha insistido en que él no sabía nada y que conoció el caso cuando se publicó en la prensa. Una versión que contradice la de la secretaria general del partido, Marta Rovira, que asegura que se informó a Junqueras, tal y como recoge el informe interno del partido sobre el caso.
En diferentes ocasiones el expresidente del partido ha hecho referencia a grupos de Whatsapp en los que él no estaba para demostrar que se hacían acciones sin que él supiera nada. Preguntado por Rovira, se ha mostrado dispuesto a reunirse con ella y, de hecho, a negado que él haya rechazado ofertas de reuniones. “Estoy dispuesto a reunirme con todo el mundo, evidentemente; con Marta, también. Nos unen muchas cosas y hemos hecho cosas muy relevantes que nos podemos sentir orgullosos. Ahora y siempre”, ha dicho.