Segunda condena al expresident de la Generalitat Quim Torra por desoír una orden de descolgar una pancarta con lazos amarillos en favor de los presos del procés. La magistrada ha impuesto al expresident 15 meses de inhabilitación para ocupar cargos públicos y una multa de 24.000 euros por un delito de desobediencia.
La Fiscalía pedía veinte meses de inhabilitación y una multa de 30.000 euros para el expresident, al que acusaba de haberse instalado en la “insumisión institucional” por sus dos negativas a retirar las pancartas y lazos en favor de los presos. Torra decidió no acudir a su segundo juicio (podía legalmente no hacerlo).
La defensa reclamó la absolución y, en una dura intervención al final del juicio, comparó a la Fiscalía con el presidente ruso, Vladímir Putin, por las críticas que la fiscal del caso realizó a la resolución de la asamblea parlamentaria del Consejo de Europa que, antes del indulto, pidió la excarcelación de los condenados por el 1-O, reformar el delito de sedición y retirar las peticiones de extradición.
En su sentencia, la magistrada considera probado que Torra no dio cumplimiento a la orden judicial de retirada de la pancarta por los presos de la fachada del Palau de la Generalitat en septiembre de 2019. Descarta además, como mantenía la defensa, que la actitud de Torra estuviera amparada por los derechos fundamentales de libertad de expresión o la inviolabilidad parlamentaria.
En suma, para la magistrada el comportamiento de Torra tras recibir la orden judicial de retirar la pancarta supone “tanto con una negativa abierta como una pasividad reiterada” a cumplir con el auto judicial, ante lo que el expresident no puede alegar desconocimiento jurídico ni falta de asesoramiento técnico.
Esta es la segunda condena a Torra por negarse a retirar pancartas y lazos amarillos en favor de los presos del procés del balcón del Palau de la Generaltiat. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunnya (TSJC) le impuso en diciembre de 2019 un año y medio de inhabilitación, condena confirmada por el Supremo en septiembre de 2020, lo que convirtió a Torra en el primer president desalojado de la Generalitat en ejercicio del cargo por sentencia judicial firme.
La segunda condena llega cuando Torra, alejado de la política institucional y de la vida de partido en Junts, ya ha cumplido íntegramente la primera: el TSJC dio por liquidada la primera condena el pasado mes de abril al comprobar que Torra había cumplido los 18 meses de inhabilitación para ejercicio de cargos públicos y pagado los 30.000 euros de multa que se le impusieron por un delito de desobediencia.