Miles de personas se vuelto a manifestar este sábado en el centro de Barcelona para pedir al Gobierno que ponga fin de manera “inmediata” al comercio de armas con Israel, al que acusan de perpetrar un genocidio en Gaza. La capital catalana no ha sido excepción al sábado de movilizaciones contra la guerra en ciudades de medio mundo.
La manifestación, convocada por la plataforma 'Prou complicitat amb Israel' -basta de complicidad con Israel- y la comunidad palestina de Catalunya, ha arrancado pasadas las cinco de la tarde en la plaza Urquinaona para proseguir por Via Laietana, y ha contado con el apoyo de la CUP y los comuns.
Una gran pancarta con el lema “paremos el genocidio en Gaza, basta del comercio de armas con Israel” ha presidido la marcha, en la que se han exhibido banderas palestinas, y ha terminado con una ocupación simbólica de la estación de Francia de Barcelona, tal y como ha ocurrido en estaciones centrales de otras ciudades del mundo como Nueva York.
Los convocantes de esta protesta denuncian que Israel está bombardeando “intencionadamente” barrios residenciales, hospitales, centros educativos, campos de refugiados, lugares de culto o ambulancias, entre otros puntos civiles.
“Israel está llevando a cabo un castigo colectivo contra la población indefensa y cautiva”, ha subrayado la portavoz de las entidades convocantes de esta manifestación, Celia Cassenyes, y ha añadido: “No hay ninguna justificación que permita a Israel cometer las masacres que está llevando a cabo en Gaza”.
“Viendo que la demandas de alto el fuego están siendo completamente ignoradas por Israel”, dicen las entidades, es necesario que el Gobierno ponga fin al comercio de armas con este Estado para “acabar con el genocidio en Gaza”.
Las entidades sustentan esta reclamación en la ley española de 2007 sobre el control del comercio exterior de material de defensa y de doble uso y en el Trato internacional sobre el comercio de armas, ratificado por España en 2014. Según los convocantes de la protesta, ambos textos prohíben la venta de armas a países en conflicto.