La oposición ecologista a las infraestructuras y macroproyectos acordados entre ERC y el PSC ha salido a la calle este sábado en Barcelona. Miles de personas se han manifestado en contra de las obras y del pacto de socialistas y republicanos al considerar que “rompe el futuro social, económico y medioambiental” que Catalunya necesita.
Tras meses de negociaciones, ERC y PSC desbloquearon los presupuestos catalanes al acordar aumentar la capacidad del Aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat (sin concretar cómo), facilitar los trámites del macrocasino Hard Rock en Tarragona (un proyecto que lleva una década sobre la mesa) y construir la autovía conocida como el Cuarto Cinturón, que conecta Sabadell con Terrassa.
El apoyo del Govern a estos tres proyectos fue la condición que puso el PSC para pactar los Presupuestos de 2023. El Ejecutivo de Pere Aragonès accedió para sacar adelante las cuentas, si bien no se ha dedicado partidas presupuestarias a los macroproyectos este año para mantener el apoyo a los presupuestos de los comuns, que rechazan las tres obras. Las cuentas se votarán el próximo viernes.
Tanto los comuns como la CUP han acompañado este sábado a los colectivos ecologistas de toda Catalunya y a las plataformas contrarias a los tres macroproyectos que se han manifestado en Barcelona. La protesta estaba organizada por las plataformas ZeroPort, Aturem Hard Rock y a Campaña contra el Cuarto Cinturón. Además, se han adherido a la marcha más de 90 colectivos y entidades.
Representantes de las tres principales plataformas convocantes han denunciado el modelo económico y de ordenación del territorio que hay detrás de las tres iniciativas. El portavoz de la plataforma contra el Cuarto Cinturón, Joan Carles Sallas, ha defendido “otro modelo de ordenación del territorio que respete la naturaleza y la biodiversidad”.
La portavoz de ZeroPort, Ariadna Cotén, ha cargado contra la “connivencia” de los partidos y los políticos con los “especuladores y grandes empresarios”, los “únicos”, ha agregado, a los que benefician proyectos como el Hard Rock, la nueva autovía y la ampliación de El Prat. Anna Recasens, de la Plataforma Aturem Hard Rock, ha celebrado la unidad mostrada este sábado contra un modelo “que rompe el territorio”.
El diputado de la CUP Xavier Pellicer ha criticado que el Govern no tiene “ningún rumbo” y que su política “es la que marca el PSC y Junts”. Y laa líder de los comuns, Jéssica Albiach, ha clamado contra el “negacionismo climático” que, a su juicio, suponen las tres obras.
El proyecto que ha levantado más polvareda en los últimos años ha sido la ampliación del Aeropuerto del Prat. Los planes de Aena de alargar la tercera pista a costa de una parte de las lagunas protegidas de la Ricarda quedó aparcado en 2021 precisamente por la negativa del Govern con ERC a la cabeza. De esa forma, el Gobierno aprobó sus planes aeroportuarios hasta 2026 sin contar con esa inversión.
Ahora el documento pactado con el PSC habla de una “modernización” del aeródromo para que gane capacidad y se convierta en “hub internacional” y en paralelo a una mayor protección del Delta del Llobregat. Pero todo ello sin especificar cómo. Por su parte, la patronal Foment del Treball tiene una comisión técnica con nueve posibles proyectos de ampliación sobre la mesa y que se presentarán pasadas las elecciones municipales. Hasta la fecha solo ha trascendido un plan para levantar una cuarta pista sobre el mar, rechazado por todos los partidos.
En cuanto al Hard Rock, que recibe el nombre de sus actuales promotores, se trata de un complejo de casinos que lleva presente en el debate político catalán desde los inicios de Artur Mas en el Govern. El proyecto inicial era hacer un Eurovegas, pero fue cambiando de impulsores. El Govern tiene pendiente desencallar el plan urbanístico y ERC no tenía ninguna prisa en hacerlo, pero el acuerdo con los socialistas les obliga a “completar los procesos relacionados con el inicio del proyecto” durante el primer semestre de este 2023.
Respecto la autovía entre Terrassa y Sabadell, que había levantado suspicacias en las secciones locales de ERC, en el primer trimestre de este año está previsto un convenio de la Generalitat con el Ministerio de Transportes para redactar y financiar el proyecto, cuyas obras no tienen todavía fecha de inicio.