Errata decisiva en la pancarta de Valencia

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha lamentado la muerte este domingo de una mujer alemana de 51 años que estaba hospitalizada en estado crítico por el atentado terrorista de La Rambla de la capital catalana.

En un mensaje de Twitter, la alcaldesa ha compartido la noticia en su perfil y ha escrito: “Que la tierra le sea leve. Barcelona os recordará siempre”.

En la misma red social, el conseller de Salud, Toni Comín, ha expresado sus condolencias a familiares y amigos de la fallecida “en estos momentos tan difíciles”.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha lamentado este domingo la muerte de la mujer alemana que resultó herida crítica en el atentado de la pasada semana en La Rambla de Barcelona.

“10 días después de los atentados de #Barcelona y #Cambrils, hoy hay una víctima mortal más. Mi cariño para sus familiares. DEP”, ha firmado Cifuentes en su cuenta de Twitter.

Otros políticos madrileños, entre ellos Sara Hernández (PSOE) o Paloma Andrados (PP), han querido manifestar también su pésame por la muerte de la ciudadana alemana.

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, se reunirá el próximo martes por la mañana con el ministro del Interior marroquí, Abdelouafi Laftit, con el fin de intercambiar información al más alto nivel sobre las investigaciones de los atentados en Cataluña.

Desde la activación en España de la alerta antiterrorista al nivel 4 en junio de 2015, se han producido operaciones conjuntas entre ambos países contra el terrorismo yihadista. Más de 175 personas con perfiles violentos y radicalizados han sido arrestadas en dichas operaciones.

Mediante un comunicado, el Ministerio del Interior ha aseverado que “este viaje es una muestra más de la inmejorable relación entre España y Marruecos en materia de seguridad, concretamente en el ámbito de la lucha antiterrorista, pero también en lo relativo a, entre otros, el crimen organizado o la trata de personas”.

El primer viaje al extranjero como ministro del Interior de Juan Ignacio Zoido tuvo a Marruecos como destino. Volviendo el pasado junio en una visita de cortesía para saludar al por aquel entonces nuevo ministro marroquí del Interior, Abdeluafi Laftit, nombrado el pasado mes de abril.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha apelado a la unidad de los políticos y de la sociedad frente al terrorismo, y ha rechazado los pitos y las protestas contra el rey y el Gobierno en la manifestación de este sábado en Barcelona: “Las afrentas de algunos no las hemos escuchado”.

“Ayer estuvimos donde teníamos que estar y con quien tuvimos que estar, expresando nuestro apoyo a las víctimas del terrorismo y mostrando solidaridad con la inmensa mayoría de los catalanes sensatos y respetuosos”, ha dicho Rajoy durante un acto del Partido Popular en Pontevedra con el que el partido abre el curso político.

El presidente del Gobierno se ha mostrado “orgulloso” de haber participado en la manifestación de Barcelona contra el terrorismo y de que en la misma estuviera también el rey Felipe VI. El presidente del Gobierno ha señalado además que le gustaría “que algunos responsables políticos renunciaran a sus planes de ruptura y radicalidad”. “Creo que es lo que quiere la mayoría de la sociedad catalana”, ha subrayado.

En este sentido, ha dicho que seguirá haciendo todo lo que esté en su mano para mantener la unidad frente al terrorismo. “Aparcar las diferencias nos hace grandes. Vencer al terrorismo desunidos no es posible”, ha indicado.

Rajoy ha subrayado en varias ocasiones que “las víctimas nos quieren unidos y los terroristas nos quieren desunidos”, y ha resaltado que la grandeza de la democracia es su unidad frente a quienes quieren liquidarla. “Si lo asesinos cambian de métodos, hábitos y conductas, nosotros tendremos que hacer lo mismo con las herramientas del Estado de Derecho”, ha sentenciado.

La cifra de víctimas mortales en los atentados de Barcelona y Cambrils ha ascendido este domingo a 16. Ha muerto una mujer alemana de 51 años que desde el 17 de agosto estaba ingresada en estado crítico en la UCI del Hospital del Mar de Barcelona. Así lo ha comunicado del departament de Salut de la Generalitat, responsable de informar del estado de los heridos en la masacre. A día de hoy quedan 24 personas ingresadas en varios hospitales catalanes, de los cuales 5 están en estado crítico y 4, en estado grave.

El dueño del locutorio de Ripoll, en libertad provisional desde el jueves, ha estado presente en la concentración en esta localidad contra el terrorismo, según ha publicado RAC1. A la marcha han acudido también algunos familiares de los jóvenes terroristas, entre ellos la hermana de Driss y Moussa Oukabir, encargada de la lectura del manifiesto que ha dado cierre a la concentración.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha dado las gracias a los asistentes a la manifestación de este sábado por “haber llenado Barcelona de esperanza, enviando al mundo un poderoso mensaje de paz”.

Los profesionales de emergencias han bajado a la zona 0 del atentado de Barcelona entre aplausos de los asistentes a la concentración convocada en la ciudad condal. Muchos ciudadanos habían bajado hasta ese lugar tras asistir a la manifestación en contra del terrorismo.

El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha querido quitar importancia a los abucheos que ha recibido el rey Felipe. “No hay que magnificarlo”, ha afirmado en declaraciones a Catalunya Ràdio, a la vez que ha defendido que “la libertad de expresión debe primar por encima de todo”. “La gente se ha expresado en libertad, en convivencia y en paz”, ha zanjado Puigdemont.

Barcelona ha salido a la calle para gritar contra el miedo y contra el terrorismo. Más de medio millón de personas –según cifras de la Guardia Urbana– han marchado por el centro de la capital catalana portando rosas y banderas al grito de “No tenim por” (no tenemos miedo). En la cabecera, los cuerpos de emergencias que atendieron a las víctimas del atentado terrorista del pasado 17 de agosto han marcado el paso de la manifestación.

“Si su ideología es la muerte, la nuestra es una apuesta decidida por la vida”, han proclamado la activista Míriam Hatibi y la actriz Rosa María Sardá al término de la manifestación. Han sido ellas las encargadas de leer el manifiesto que ha puesto fin a una concentración multitudinaria que ha servido para tratar de poner punto y final a la semana y media de duelo en que se ha sumido Barcelona tras el atentado.

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De entre las miles de manifestaciones de afecto que se han dado en la concentración de esta tarde, una de ellas es la ovación que los asistentes han ofrecido al cuerpo de bomberos de Barcelona. El Ayuntamiento de la ciudad condal ha publicado un vídeo en el que unos bomberos emocionados, con rosas en las manos, reciben los aplausos de los ciudadanos.

“Es de agradecer que en pleno mes de agosto Barcelona haya recuperado su bella tradición de ciudad de paz”, ha celebrado el president de la Generalitat, Carles Puigdemont. En declaraciones a TV3 junto a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha destacado que el mensaje de la manifestación de este sábado contra el terrorismo haya sido de paz. La alcaldesa ha valorado la multitudinaria marcha como una respuesta de “orgullo de una ciudad valiente”.

“La ciudadanía ha marcado el camino a la ciudad”, ha proclamado Colau, que ha agradecido una vez más la actitud de los servicios de emergencia y ha reivindicado acto seguido Barcelona como una ciudad que “apuesta por la convivencia, la diversidad y la paz”.

Ante la presencia de las autoridades del gobierno español, y después de que este jueves acusara al Estado de “hacer política con la seguridad”, Puigdemont ha rechazado la polémica. “Podemos tener legítimas discrepancias políticas, pero en los elementos de lucha contra el terrorismo debemos ser el máximo de eficaces, y lo hemos demostrado”, ha zanjado.

La Guardia Urbana ha cifrado en medio millón de personas los asistentes a la manifestación “No tinc por” contra el terrorismo y en apoyo a las víctimas de los atentados en Barcelona y Cambrils. La multitud ha llenado el Paseo de Gracia con pancartas a favor de la paz y de solidaridad con los heridos y familiares de las víctimas mortales, avanzando detrás de una cabecera en la que había profesionales de emergencias en primer plano y autoridades y políticos, en el segundo.

Maite Fuertes, que ha bajado a la calle con su hermano para unirse a la marcha, porta una rosa roja. Se cuentan por miles las flores –también las hay blancas– que se han repartido esta tarde para condenar la violencia. Para ella, ese es precisamente el objetivo primordial de la marcha: gritar un 'no' sonoro al terrorismo y al miedo que provoca.

Para la barcelonesa, ha sido un acierto no mezclar la indignación por el atentado y el dolor de las pérdidas del pasado 17 de agosto con la política en la cabecera de la marcha. Por ello aplaude la decisión que quienes estén en primera línea sean los que ya estuvieron en primera línea durante la tragedia. “Los protagonistas son los que ayudaron, no los políticos”, dice.

A unos metros de ella, Ana Maria Llorente, vecina de Cerdanyola, ha venido con amigas a la marcha. Desde que conoció la convocatoria, lo tuvo claro: “No estoy de acuerdo con las guerras, y por tanto tampoco con el rechazo a migrantes, que no son culpables, sino víctimas”, denuncia Ana Maria. Con casi 70 años, teme un aumento del rechazo a los migrantes. Una situación triste, comenta. Pues, como recuerda, “todos lo hemos sido en algún momento”. “Los de aquí siempre se han ido fuera a trabajar y nunca han sido tachados de terroristas, ¿verdad? Pues ellos igual, no los juzguemos a todos por igual”, destaca, rosa en mano.

“Si su ideología es la muerte, la nuestra es una apuesta decidida por la vida”, han proclamado la activista Míriam Hatibi y la actriz Rosa María Sardá al término de la manifestación. En un breve parlamento, de no más de cinco minutos, han agradecido la tarea de todos los profesionales y ciudadanos que ayudaron a las víctimas en La Rambla y en Cambrils. “Nos encontrarán más unidos que nunca en la defensa de la libertad y de la democracia, dentro de la diversidad de culturas y creencias”, ha reivindicado Hatibi, que acto seguido ha defendido una sociedad “sin ninguna expresión de xenofobia y racismo”.

El acto ha concluido con la canción 'El cant dels ocells', que la multitud ha escuchado en silencio mientras levantaba al aire flores o carteles en favor de la paz y contra la islamofobia.

Mientras miles de personas llenaban las callles de Barcelona contra el terrorismo, también en Ripoll sus vecinos se han concentrado para rechazar lo ocurrido. A la manifestación de este municipio, al que pertenecían la mayoría de miembros de la célula yihadista, han acudido algunos familiares de los jóvenes terroristas, como la hermana de Moussa –muerto en Cambrils– y Driss Oukabir –detenido por la policía–. “Debemos trabajar juntos para que esto no vuelva a suceder”, ha afirmado la hermana, quien ha recibido aplausos mientras cortaba su discurso por las lágrimas. Encargada de leer un manifiesto ante los asistentes, ha pedido a todas las instituciones y entidades sociales colaborar para que jóvenes hijos de inmigrantes, como sus hermanos, “sientan que Catalunya es su tierra” y puedan así “rechazar cualquier mensaje radical o extremista”.

La manifestación de Barcelona contra el miedo y el terrorismo se ha llenado de flores rojas, amarillas y blancas. Grupos de voluntarios han repartido a los asistentes flores con los colores de la ciudad.

Sonoras pitadas al rey a lo largo de la manifestación. Además de a su llegada a la parte delantera de la marcha, el monarca está recibiendo abucheos en otros puntos de la concentración cuando su imagen aparece en las pantallas que hay en Paseo de Gracia. A la altura de Gran Vía, una de estas imágenes retransmite en directo la cabecera de la manifestación, y en cuanto aparece el Felipe VI, la gente responde con silbidos y gritos de “fuera, fuera”.

La pancarta “No tinc por” encabeza la multitudinaria manifestación que ya se ha iniciado y que llena el Paseo de Gracia de Barcelona contra el terrorismo y en solidaridad con las víctimas por el atentado del 17 de agosto. Agentes de Mossos y Guardia Urbana, bomberos, enfermeros, médicos, comerciantes y ciudadanos que socorrieron a las víctimas en La Rambla marchan al frente de la protesta.