Los Mossos d'Esquadra han acordonado una zona entre las calles Rambla y Boquería, en el centro de Barcelona, tras recibir la alerta sobre una posible explosión que se habría registrado en un hotel. La policía autonómica ha acudido con un amplio dispositivo que rápidamente ha desalojado las calles y las ha cerrado al tráfico. Sin embargo, todo podría tratarse de un susto producto del pánico, por ser una zona y una fecha similar a los atentados que se vivieron el 17 de agosto de 2017. Tras constatar que no se habían producido heridos de gravedad ni tampoco daños estructurales en el edificio, los Mossos han comprobado que ni siquiera se había producido explosión alguna en el edificio, por lo que han descartado de forma contundente la alerta terrorista.
El incidente ha ocurrido en torno al mediodía de este lunes, cuando en la zona de la Plaça del Pi se ha escuchado el uso de pirotecnia. En la calle se había escuchado un fuerte impacto y, según algunos testigos presenciales, alguien había salido del Hotel Petit Palace con restos de sangre en una mano. Dos hechos sin conexión aparente pero que algunos testigos presenciales han relacionado. Tras recibir la alerta, a la zona se han desplazado cinco vehículos de Bomberos, cuatro de Mossos, tres del Servei d'Emergències Mèdiques (SEM) y siete de la Guardia Urbana. Además se ha cerrado el tráfico en la zona y se ha cortado el paso de transporte público.
Según han explicado posteriormente, la pirotecnia está relacionada con la festividad de Sant Roc, que se celebra en el barrio gótico de la capital catalana. MIentras, el incidente en el hotel había consistido en una caída de un cliente en la ducha que ha roto la mampara de vidrio. Él ha sido el único herido, con unas lesiones fruto de un accidente que no han revestido gravedad.
El establecimiento afectado es el hotel Petit Palace Boquería, situado en el número 10 de la calle del mismo nombre. Se trata de un edificio que está al lado de la zona del Pla de l'Os de la Rambla, el punto donde se produjo el atentado mediante atropello masivo el 17 de agosto de 2017, una fatal fecha de la que este martes se cumplen 4 años. Estas dos coincidencias han generado alarmas en un primer momento, lo que ha hecho que los Mossos activasen un gran dispositivo, pero después el nivel de alerta ha ido reduciéndose hasta confirmarse que no era más que un susto.