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Los Mossos blindan el Banc Expropiat para evitar su reokupación

Desde media mañana de este domingo un amplio dispositivo de antidisturbios de los Mossos d'Esquadra ha rodeado el Banc Expropiat para evitar que la antigua sucursal sea reokupada. La presencia policial ha evitado que los manifestantes vuelvan al Banc Expropiat, cuyo desalojo este lunes ha provocado una semana de concentraciones de apoyo, disturbios y cargas policiales.

La protesta se ha desarrollado sin incidentes durante toda la mañana hasta pasadas las 14 h, cuando se han producido varias cargas policiales en la calle Desamparats después de que algunos concentrados lanzaran agua y harina a los agentes. También ha habido carreras en el mercado de la Abaceria, y en Travessera de Gràcia la policía ha identificado a una mujer.

Este diario ha comprobado una persona herida en el brazo por golpe de porra. Los manifestantes también han denunciado por lo menos dos personas heridas en la cabeza por las cargas. Y a través de Twitter el concejal de la CUP en Barcelona, Josep Garganté, también ha acusado a un mosso de golpearle con la porra “cuando estaba de espaldas andando”. Por su lado, los Mossos han explicado que siete agentes han resultado heridos.

La concentración se ha retomado en la plaça Revolució pasadas las 16 h, y sobre las 18 h ha arrancado una manifestación de unas 500 personas que ha recorrido las calles del barrio. La marcha se ha desconvocado en la plaza Rovira i Trias, en el norte de Gracia. Los miembros del Banc Expropiat han avisado que lanzarán más convocatorias la próxima semana. El objetivo es el mismo que este domingo no han logrado: volver al Banc Expropiat.

Durante la mañana, grupos de una cincuentena de personas se han apostado frente a los cuatro puntos del cordón policial desde donde los antidisturbios mantienen blindado el Banc. En la Travessera de Gràcia varias familias han jugado con sus hijos con cascos de plástico frente a la mirada de los antidisturbios.

Al otro lado de la Travessera, los manifestantes llevaban máscaras de papel con la cara de Manuel Bravo Solano, el empresario inmobiliario propietario del Banc Expropiat que pidió el desalojo del local cuando el Ayuntamiento de Ada Colau dejó de pagarle el alquiler que había acordado con el exalcalde Trias. La Fiscalía investiga a Trias por malversación de dinero público.

En la calle Mare de Déu dels Desemparats, algunos manifestantes han insultado a los Mossos y han recordado víctimas de intervenciones policiales como Juan Andrés Benítez, Ester Quintana o Patricia Heras, sin que la cosa haya ido a mayores.