El nivel de participación que alcanzará el 9-N es una de las grandes incógnitas de la jornada. Según las encuestas la participación en una eventual consulta ronda entre el 40 y el 50%, por ejemplo; en el último sondeo de GESOP para El Periódico, el 47% de los encuestados aseguraba tener intención de participar. Para cumplirse ese pronóstico, los votos deberían sumar más de dos millones.
Sin embargo hay que tener en cuenta que la abstención tiende a ser mayor que la reflejada por las encuestas, más aún si contamos con que el proceso participativo del 9-N no tiene carácter oficial. Para comparar con cifras de participación en votaciones promovidas desde la sociedad hay que remontarse a las consultas populares independentistas celebradas en los municipios entre 2009 y 2011, que obtuvieron cerca de 900.000 votos, un 18% de participación de media en los 554 municipios donde se celebraron.
Al carecer de censo electoral, tampoco es fácil saber cuál es el número exacto de personas que pueden participar el 9-N, pero el total de electores catalanes supera los 5,2 millones. En las últimas elecciones, al Parlamento Europeo, 2,5 millones de catalanes ejercieron su derecho al voto, mientras que en las anteriores, las autonómicas de 2012, la cifra ascendió hasta los 3,6 millones de votantes.
La web habilitada por la Generalitat para el seguimiento de los resultados del 9-N señala que, con el 96,8% de las mesas escrutadas, el 80,76% de los 2.236.806 ciudadanos que han participado en el proceso participativo del 9N han votado 'sí' a las dos preguntas que se han planteado.
Según los datos ofrecidos por el centro de seguimiento del 9-N, el número de personas que se habría inclinado por el doble 'sí' alcanzaría las 1.806.336
El Govern de la Generalitat ha estimado que la participación en el 9-N ha llegado a los 2,25 millones de votantes. Estos son los cálculos que ha aportado la vicepresidenta del Govern con 5.921 mesas escrutadas, que suman por ahora 2.043.226 participantes. Con el recuento provisional se impondría el sí a la independencia de Catalunya -el doble 'sí'- con 1.649.239 votos, un 80,72% de las papeletas. El 'sí-no' -sí a que Catalunya sea un Estado pero no a la independencia- obtendría un 10,11% de los votos, esto es 206.599 papeletas. Por último, el 'no' obtendría el 4,55% de los votos. El voto en blanco es del 0,56%. En base al padrón y tomando los 2,25 millones de votantes que estima el Govern, la participación sería de un 35,7%.
Las presidentas de la Assemblea Nacional de Catalunya (ANC) y Òmnium Cultural, Carme Forcadell y Muriel Casals, han asegurado este domingo que el camino hacia la autodeterminación de Cataluña “no tiene marcha atrás” después de que más de dos millones de catalanes hayan votado en el proceso participativo del 9N.
“Hoy hemos sido soberanos. Ya nunca más pediremos permiso para ser quien somos”, ha asegurado Casals en su intervención para valorar la jornada, mientras que Forcadell ha defendido que este domingo los catalanes han desafiado al Estado demostrando, ha dicho, ante la comunidad internacional que no lo sienten suyo.
Forcadell, que ha argumentado que el 9-N ha cerrado una etapa en la historia de Catalunya, ha reivindicado que los catalanes han evidenciado este domingo que seguirán trabajando por la independencia hasta lograrla: “Nada ni nadie nos parará, nadie impedirá que continuemos trabajando hasta la victoria final”.
Artur Mas ha comparecido con la vicepresidenta Joana Ortega, para agradecer la tarea realizada por los 40.000 voluntarios que han hecho posible el 9-N. “Tenemos un deber de gratitud por su generosidad”, ha proclamado Mas. También ha dado las gracias Mas a los Ayuntamientos que han colaborado y a los “claramente más de 2 millones que han participado”
El president ha comparecido para anunciar también que las cifras de participación se sabrán dentro de una hora. Tanto las cifras provisionales de participación absoluta y los resultados del escrutinio de las distintas opciones de votación. A la espera de ello, Mas ha asegurado que la participación ha sido “muy alta”.
Mas ha afirmado que Catalunya “ha dado hoy una lección de democracia”, y ha asegurado que ahora tiene que decidir su futuro “participando y votando, de manera definitiva”.
Algunos de los organizadores de la consulta de 2009 reconocen que los dos procesos mantienen “paralelismos”, pero afirman que el 9-N es una votación más “formal”
La vicepresidenta del Govern Joana Ortega comparecerá después de las 22:30 para ofrecer el dato final de participación durante la jornada del 9-N. También ofrecerá, aunque no estaba confirmado, resultados provisionales de la votación.
El Priorat (35,2%) y el Pla de l'Estany (33,2%) son las comarcas con más participación en la 13h y la Val d'Aran (8,5%) la que menos
La jornada de votación del 9-N ha terminado. Los puntos de votación cierran a partir de las 20 h y los voluntarios de las mesas empiezan el recuento de los votos. En caso de que haya colas los locales permanecerán abiertos hasta que todos los participantes hayan introducido su papeleta. Los resultados del recuento, por lo que respecta a la participación absoluta, los ofrecerá el Govern a partir de las 22.30 h. El resultado propiamente de la votación se conocerá mañana, según lo previsto. Esto teniendo en cuenta que hay puntos de votación fuera de Catalunya -en América- que seguirán abiertos unas horas, y además habrá delegaciones de la Generalitat en las veguerías catalanas en las que se podrá votar durante los próximos 15 días, un dispositivo previsto para quienes estaban hoy fuera.
La promotora de Guanyem Barcelona y exportavoz de la PAH, Ada Colau, ha publicado un texto en su facebook explicando por qué ha votado 'Sí-Sí' en el proceso participativo del 9-N. En él asegura que, pese a no haberle “interesado en la vida crear nuevos estados” y no creer en “el cuento ese de primero la independencia, luego ya arreglaremos el resto”, ha decidido emitir un voto favorable a la independencia porque hay “un movimiento popular en Catalunya que está reclamando más y mejor democracia” contra “un Gobierno del PP que (con la complicidad del PSOE) ha tomado una deriva autoritaria y recentralizadora que niega derechos tan fundamentales como la libertad de expresión”.