El crédito de 2,6 millones de euros aprobado por la Generalitat para la cadena de establecimientos deportivos DiR ha levantado ampollas entre varios partidos de la oposición, que han reclamado explicaciones sobre los criterios seguidos por el departamento de Empresa para otorgarlo. Formaciones como el PSC, la CUP y los 'comuns' han reclamado este lunes conocer todos los detalles sobre el préstamo, después de que el diario Ara informase el fin de semana de que la empresa de gimnasios había obtenido este beneficio a través de la línea de crédito pública AVANÇSA, de los cuales ya se han aportado 1,4 millones de euros.
Por parte del PSC, la vicepresidenta segunda del Parlament, Eva Granados, ha reclamado conocer el criterio seguido por la Generalitat en esta operación, aprobada en diciembre pasado, y por qué se ha elegido especificamente esta sociedad para quedarse con casi un tercio de los fondos totales gestionados mediante esta línea de crédito. Entre otras cuestiones, Granados también ha indicado que quiere saber cuántas solicitudes ha habido para obtener fondos de AVANÇSA y qué pasará con las empresas que se han quedado fuera. “O esta empresa está en una situación muy diferente o tiene unos criterios excepcionales”, a afirmado Granados.
También la CUP ha apuntado en esta dirección. Los anticapitalistas han registrado una batería de preguntas parlamentarias para el departamento de Empresa, controlado por Junts, que entre otras cosas reclaman explicaciones de cómo encaja una cadena de gimnasios con una línea de reactivación industrial, y de qué potencial “tecnológico o comercial”, han visto en ella. La CUP considera que el préstamo se ha dado de forma poco transparente y reclama también conocer el importe total, plazo, carencia e intereses del crédito concedido.
Más lejos ha ido Joan Mena, portavoz de los 'comuns', que directamente ha acusado al Govern de “dar dinero a una empresa amiga de Junts”. Según ha destacado la formación, los gimnasios DiR habrían tenido acceso a un fondo previsto para empresas industriales en problemas por la COVID-19 debido a la cercanía entre sus directivos y el partido que controla el departamento de Empresa, lo que han calificado de “escándalo” y de “trato de favor”. Catalunya en Comú ha exigido además la comparecencia del vicepresident Pere Aragonès para informar sobre esta cuestión.
AVANÇSA es una sociedad mercantil controlada por la Generalitat que se dedica a invertir capital en diferentes empresas con problemas de financiación para reordenar, impulsar o proteger parcelas del sector industrial catalán. En concreto, el fondo al que se ha acogido DiR tiene por objeto la “reactivación industrial postcovid”, y según explica el departamento, está pensado para ayudar a empresas que sufren dificultades para continuar abiertas como consecuencia de las restricciones impuestas durante la pandemia. El Govern asegura que el objetivo de esa línea es aportar liquidez a las empresas para que puedan continuar a flote y mantener así los puestos de trabajo.