El secretario general del PSOE ha desgranado su plan para solucionar el conflicto entre Catalunya y España en una visita este domingo a la tradicional Fiesta de la Rosa del PSC. El proyecto de Pedro Sánchez ha quedado resumido en cuatro grandes puntos: “Ley, diálogo, acuerdo y votación”. Este esquema básico de acción pasa por una reforma federal de la Constitución que el líder socialista ha definido en clave positiva: “Sí a la reforma constitucional, a la unión de España y a la votación”.
Sánchez ha reclamado un cambio de actitud tanto al presidente del gobierno español como al de la Generalitat. Les ha pedido que dialoguen y ha enviado mensajes a cada uno de ellos. A Mariano Rajoy le ha pedido que “deje de ponerse de perfil y coja el toro por los cuernos” mientras que a Artur Mas le ha pedido que cumpla la ley y le ha calificado de “insensato” por querer “obligar a escoger entre ser catalanes o españoles”.
Pedro Sánchez se ha esforzado en marcar un discurso con un tono que ponía énfasis en aspectos positivos, hablando de los beneficios de la unión y destacando el papel de los socialistas andaluces, extremeños, gallegos y de otros puntos de España que “han levantado fábricas, han luchado por los derechos de los trabajadores y han defendido la libertad ”en Catalunya. Sánchez les ha contrapuesto con los que ha llamado “guardianes de las esencias” que quieren “levantar fronteras y cavar fosos”.
No ha estado solo el nuevo secretario general del PSOE en el pinar de Gavà, escenario de la Fiesta de la Rosa donde se han reunido todos los nombres propios del socialismo catalán. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha mostrado la buena relación entre el PSOE y el PSC, al que Sánchez ha felicitado por ser “los únicos que han levantado la bandera de la concordia y el diálogo”. Los asistentes han acogido las palabras de Sánchez con aplausos y se han entregado al nuevo líder socialista con un fervor que no se veía con Rubalcaba en las anteriores ediciones del evento que representa el pistoletazo de salida del curso político para el PSC.
Una sonada ovación también se la ha llevado Pasqual Maragall, cuando ha sido recordado tanto por Sánchez como por Iceta en el Día Mundial del Alzheimer con todos los asistentes aplaudiendo de pie. Los abucheos y los silbidos se han reservado para las referencias a otro expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol.