La defensa de Puigdemont espera que la decisión del TJUE de esta semana encarrile el resto de sus causas en Europa
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) se pronunciará el próximo jueves sobre si Oriol Junqueras llegó a ser eurodiputado y si por tanto fue juzgado pese a disfrutar de inmunidad. La decisión puede tener importantes consecuencias para el líder de ERC y en la justicia española pero, de rebote, tendrá efectos sobre Carles Puigdemont, que también está a la espera de que la justicia europea resuelva si puede acceder a la condición de eurodiputado. La defensa del expresident cree que varias de las causas judiciales que tiene abiertas quedarán encaminadas con la primera decisión del TJUE.
En este momento Puigdemont tiene dos grandes patatas calientes judiciales en Europa. La primera es sobre si tiene derecho a ocupar su escaño de eurodiputado, una cuestión que el Parlamento Europeo le negó el pasado mes de junio alegando que debía guiarse por la legislación española y que, según esta, Puigdemont no había adquirido la condición plena de diputado por no haber pasado por Madrid a jurar la Constitución.
El líder de JxCat demandó entonces a la Eurocámara ante el TJUE por esa decisión, primero reclamando medidas cautelares, que fueron rechazadas. Ahora por tanto está a la espera de que el tribunal se pronuncie sobre su caso.
La segunda cuestión abierta en este momento es sobre la euroorden que el Tribunal Supremo volvió a enviar a Bélgica poco después de que se dictara la sentencia del procés. En esta ocasión el juez Pablo Llarena requiere al dirigente independentista por sedición y malversación. Tras aplazarla en noviembre, la justicia belga celebrará este lunes la primera vista sobre la euroorden, que también se dirige contra Toni Comín.
La defensa de ambos ya ha avanzado que reclamará al juez belga esperar para ver cómo se pronuncia el TJUE, situado en la ciudad de Luxemburgo, sobre la demanda de Puigdemont al Europarlamento antes de decir sobre la euroorden.
Un pie en la Eurocámara o blindar el portazo
Según las tesis de la defensa de Puigdemont, todas las anteriores cuestiones quedarán previsiblemente atravesadas por la decisión que el alto tribunal europeo emitirá este mismo jueves. Eso es así porque, de reconocer que Junqueras tenía derecho a acceder a su acta de diputado pese a no haber acudido a jurar la Constitución, estarán a la vez reconociéndolo para Puigdemont. Y, de ocurrir eso, estaría también infiriendo que el expresident está protegido por la inmunidad aparejada al cargo, por lo que la euroorden, siempre según la opinión de su defensa, quedaría en papel mojado hasta que no se reclamara un suplicatorio al Parlamento Europeo.
Es por todo eso que desde el equipo jurídico del expresident tienen confianza en que la resolución que dicte el TJUE la semana que viene pueda ser el principio de una cadena de victorias judiciales. Con todo, prefieren no cantar victoria antes de tiempo.
El tribunal puede también optar por varias decisiones que no les beneficiarían. Este jueves Puigdemont puede verse ya tanto con un pie en la Eurocámara como con su exclusión avalada en los tribunales.
Entre los escenarios negativos para Puigdemont cabe que Luxemburgo acabe rechazando la argumentación de Junqueras y que fije que España tiene derecho a exigir jurar la Constitución en Madrid para acceder al acta. También cabría la posibilidad de que evitara pronunciarse ahora sobre el caso concreto del expresident, sobre todo teniendo en cuenta que de todas formas deberá acabar tomando una decisión sobre su toma de posesión como diputado más adelante. Estas opciones son posibles, pero el equipo del líder de JxCat las considera poco probables después de haber escuchado al abogado general de la UE el mes pasado.
El informe del abogado general, clave
Si la defensa del líder independentista se muestra moderadamente optimista es sobre todo por el informe que el abogado general de la UE, Maciej Szpunar, hizo sobre el caso. A lo largo de las 28 páginas de que consta el documento, que no es vinculante pero sí muy influyente para el tribunal, el jurista argumenta que, en su situación, Junqueras debía haber adquirido el mandato parlamentario y, con él, la inmunidad vinculada al cargo. Y, para concluir esto, Szpunar hizo suyos varios de los argumentos expuestos por Puigdemont en las alegaciones presentadas en su proceso contra el Parlamento Europeo.
En concreto, el abogado general citó uno de los razonamientos centrales de la defensa de Puigdemont en su intento por convertirse en diputado europeo: que, aunque el procedimiento electoral en las elecciones europeas se rige mediante la ley de cada estado miembro (como dispone el Acta de 1976), el estatuto de los diputados solo puede regirse por el Derecho de la Unión.
Esto es así, según Szpunar, porque permitir que sea el derecho nacional quien regule una cuestión como la adquisición de la condición de diputado o la inmunidad afectaría “a la independencia del Parlamento respecto de los Estados miembros”, además de a “la autonomía del ordenamiento jurídico de la Unión en su conjunto”.
Así pues, para el abogado general, el Acta de 1976 no permite a los estados suspender el mandato de un miembro del Parlamento ni la inmunidad que lleva aparejada. Por ello, en opinión del letrado, el Tribunal de Justicia comunitario debía declarar que una persona que ha sido oficialmente proclamada como electa adquiere desde ese momento la condición de miembro del Parlamento, sin importar que no cumpla otros requisitos, como sería el juramente de la Constitución que impone la ley española.
Varias oportunidades para Puigdemont
¿Mantendrá el tribunal de Luxemburgo este mismo criterio? Todo puede pasar. Sobre todo porque la primera vez que podría hacerlo es este jueves, y entonces se pronunciará sobre unas preguntas concretas enviadas por el magistrado Marchena y relacionadas con el proceso judicial del Supremo contra los líderes independentistas, que ya tiene sentencia. Por eso fuentes jurídicas consultadas ni siquiera descartan que el TJUE pueda acabar considerando que su respuesta ya ha perdido el objeto.
Pero no será esta la última vez que Luxemburgo se pronuncie sobre esta cuestión. La demanda interpuesta por el expresident también debe resolverse en los próximos meses, y en esta ocasión no habrá pérdida de objeto de no ser que Puigdemont ya sea diputado europeo. En estos momentos todas las aspiraciones políticas del líder de JxCat pasan por convertirse en representante europeo, pero su entorno no oculta que, una vez llegado allí y adquirida la inmunidad, que de entrada le permitiría libertad de movimientos por toda Europa incluyendo España, su papel político también podría cambiar.