Torra promete de nuevo llevar a Catalunya a la independencia a la espera del aval de la CUP
La política catalana se ha abonado a la incertidumbre y la investidura del primer president post–155 no será una excepción. Tras no obtener la mayoría absoluta este sábado, Quim Torra confía en que la CUP mantenga su abstención en el debate del lunes. Los cupaires comunicarán este domingo si cambian hacia el 'no', frustran la investidura de Torra y de paso contribuyen a precipitar la convocatoria automática de nuevas elecciones. Con todo, la investidura de Torra tampoco es garantía de evitar un adelanto electoral en los próximos meses. La vuelta a las urnas forma parte de los planes del president cesado Carles Puigdemont.
Tal y como estaba previsto, el Parlament ha rechazado este sábado el primer intento de Quim Torra de convertirse en el 131 president de la Generalitat. El candidato se ha quedado a dos votos de la mayoría absoluta necesaria para ser investido en primera votación. Torra ha recibido 66 apoyos, correspondientes a la suma de JxCat y ERC. Los 65 diputados de la oposición han votado en contra y los cuatro de la CUP se han abstenido. Si este resultado se repite el lunes, Torra será president.
Los asamblearios darán a conocer su veredicto este domingo tras un cónclave de su máximo órgano de decisión en Cervera (Lleida). Tres de las 13 asambleas territoriales han solicitado a última hora un debate interno que puede frustrar las aspiraciones presidenciables de Torra. El partido ha trasladado a la militancia una pregunta tipo árbol para decidir: deberán votar si facilitan o no la investidura del candidato, y en caso afirmativo, si lo hacen con cuatro abstenciones como este sábado o algún voto a favor. La segunda sesión de investidura será el lunes a las 10:30h.
En su intervención parlamentaria, el diputado de la CUP Carles Riera, como ya hizo en el debate de investidura de Jordi Turull, ha cargado contra JxCat y ERC por llevar a cabo un “vasallaje contrario al 1-O” con la investidura de Torra. “Nos quieren convencer de que gestionando la autonomía intervenida crearán condiciones para la ruptura democrática; pero esto ni ustedes se lo pueden creer”, ha espetado el portavoz cupaire.
Torra ha negado que su Govern vaya a “practicar autonomismo” y ha pedido a la CUP “avanzar juntos”. “Siempre me he negado al 'pressing CUP' porque la CUP forma parte de la solución”, ha asegurado. Antes había tirado de una cita del escritor Joan Fuster para intentar convencer a los cupaires que faciliten la formación de Govern: “Toda política que no hagamos nosotros será hecha contra nosotros”.
Aunque la CUP confirme su abstención, Torra ha dejado claro que no será una legislatura al uso sino “excepcional” y “provisional”. Carles Puigdemont, a quien Torra ha ensalzado como como “president legítimo”, se ha encargado de confirmarlo en una entrevista en el diario italiano La Stampa. El president cesado ha asegurado que Torra convocará elecciones a partir del próximo 27 de octubre –el primer día que podría hacerlo legalmente– “si el Gobierno español sigue con la persecución” al independentismo.
Ni los más optimistas entre las filas de la oposición confían en una legislatura de cuatro años. Desde el primer Govern de Artur Mas en 2010, ningún Ejecutivo catalán ha agotado la legislatura. En ocho años los catalanes han acudido hasta en cuatro ocasiones a las urnas para escoger a sus representantes en el Parlament. Torra no ha dado ninguna señal de que el Govern que quiere formar quiera acabar con esta inestabilidad.
Críticas a Torra por el castellano
La oposición ha censurado el discurso de Torra, en el que se ha puesto como objetivo avanzar hacia la independencia y que la sociedad civil impulse un “proceso constituyente” que culmine con la redacción de una constitución catalana. Los grupos han cuestionado que el programa expuesto por Torra así como sus tuits y artículos en contra de los españoles puedan llevar a un Govern que trabaje para todos los catalanes y cambie el rumbo de la legislatura anterior. El candidato se ha disculpado desde el atril del Parlament en los mismos términos que este viernes en TV3, es decir “si alguien se había sentido ofendido” por sus comentarios.
“Parece que le cuesta aceptar que muchos catalanes hablan castellano habitualmente pero a usted no le costaría hablarlo con Rajoy y el rey”, ha sostenido el líder del PSC, Mique Iceta, en referencia a las apelaciones por el diálogo con el presidente del Gobierno y las críticas a Felipe VI que Torra ha realizado en su discurso en castellano. Más dura se ha mostrado la líder de la oposición, Inés Arrimadas (Ciudadanos), que ha acusado a Torra de representar “al nacionalismo identitario y excluyente”.
Arrimadas ha avanzado que se encargará “personalmente” de traducir los tuits y artículos de Torra y enviarlos a los máximos representantes de las instituciones europeas, Jean Claude Juncker y Antonio Tajani después de que Torra haya pedido la mediación de la UE en el conflicto catalán. “Cualquier persona que ha dicho estas barbaridades no podría sentarse para ser investido en ningún país”, ha zanjado, además de lamentar que Torra no haya reconocido que el 'procés' ha sido “una farsa” y “un fracaso”.
El rumbo del Govern inquieta a PSC y 'comuns'
Iceta también ha preguntado a Torra cuál será el rumbo de su presidencia. En concreto, si reproducirá la desobediencia de la legislatura anterior o “buscará una solución” para acordar políticas y mejoras en la financiación y el autogobierno con las fuerzas no independentistas. “No queremos que su presidencia sea la zona cero de nuestro autogobierno, pero corremos ese riesgo tras escuchar su discurso”, ha advertido Iceta, que ha recordado que la mayoría independentista del Parlament no se corresponde con una mayoría social ni un “mandato democrático” para la república, tal y como ha sostenido Torra.
“¿Será presidente de este Govern o de Puigdemont?”, ha preguntado al candidato el líder de Catalunya en Comú, Xavier Domènech, que ha recordado que Catalunya es un país de “identidades mixtas”. “El suyo ha sido un buen discurso para Puigdemont y para convencer a la CUP, pero no para el conjunto del país”, ha lamentado el líder de los 'comuns'.
“Más allá del relato de lo que ha pasado, de investigaciones sobre el 155 que ha anunciado, una pregunta es clave: ¿será un buen Govern? No lo creemos”, le ha trasladado Domènech. Tras la primera sesión de investidura, Torra no ha desvelado si los exconsellers presos y en Bélgica de JxCat, Jordi Turull, Josep Rull y Lluís Puig, formarán parte de su Ejecutivo aunque sólo de forma simbólica hasta que se consume la suspensión de sus cargos.
El jefe del PP catalán, Xavier García Albiol, ha afeado a Torra que se haya presentado como un presidente provisional. “¿Pero qué tipo de broma es esta? ¿No cree que el descrédito institucional ha llegado ya al máximo?”, ha lamentado. En línea con el Gobierno, Albiol ha advertido de que avanzar hacia la república implica “actuar al margen de la ley y pisotear derechos”. “La democracia española responderá como ya lo ha hecho”, ha avisado.