Afines a Xavier Domènech impulsan una plataforma crítica con la nueva dirección de los 'comuns'
Xavier Domènech anunció que dejaba la política con un post en Facebook en el que explicaba que había llegado el momento de dar paso a nuevas personas con ideas frescas y energías renovadas. Ha transcurrido un mes y medio y el que fuera líder de Catalunya en Comú no ha dado más detalles de los motivos de su renuncia y su ausencia al frente del partido ha tensado todavía más las relaciones entre las diferentes familias que integran el proyecto. Hasta el punto de que la portavoz en el Parlament de los 'comuns', Elisenda Alamany, una de las dirigentes más afines a Domènech, ha decidido impulsar una plataforma crítica con la actual cúpula.
Alamany, junto al diputado en el Parlament Joan Josep Nuet, la cara más visible de EUiA, presentan este martes el manifiesto que con el título 'Somos comunes. Somos soberanistas' reivindica los valores fundacionales de Catalunya en Comú y los contrapone a algunos de los problemas clásicos de los partidos tradicionales.
“Hasta ahora no hemos sido capaces de superar las dificultades, los vicios y las inercias de los partidos tradicionales, negociaciones entre aparatos, tentación de homogeneización y pactos de despachos”, se afirma en el manifiesto. No se cita a Iniciativa per Catalunya (ICV) pero se sobreentiende que se refiere a la manera de funcionar de esta formación.
Los impulsores de la plataforma aseguran que intentaron que la actual dirección les escuchase pero que tras la salida de Domènech la cúpula los ha dejado fuera de los órganos de decisión. Lo cierto es que algunos de los dirigentes afines al exlíder de Catalunya en Comú así como representantes de EUiA tienen silla en la dirección pero no están en el núcleo duro que decide la estrategia.
El coordinador general de Catalunya en Comú, Ramón Arnabat, ha salido al paso este lunes de los reproches del sector de Alamany y Nuet acusándoles de falta de “lealtad”. Arnabat ha instado a los críticos a mantener este tipo de debates en el seno de la formación y no a través de manifiestos públicos. “No deja de sorprendernos que nos enteremos por la prensa de este documento y no en los órganos de debate existentes”, ha lamentado.
Fuentes del partido que pretenden no alinearse en ninguna de las corrientes reconocen que el debate identitario complica la unidad interna pero subrayan que, a diferencia de lo que podía pasar en momentos álgidos del 'procés', ahora esto no es un problema. Interpretan que en realidad la pugna de fondo es la distribución de cuotas de poder en la dirección.
Otra de las claves para entender las tensiones nada disimuladas dentro de este espacio es la configuración de las listas municipales. Las peleas entre representantes de los 'comuns' y de Iniciativa en el territorio está complicando la elaboración de las listas hasta el punto de que hay ciudades como Girona en la que pueden acabar concurriendo en dos candidaturas diferentes.
Las broncas internas están dificultando también la formación de la lista de Badalona, una de las alcaldías más emblemáticas hasta que una alianza entre el PSC y el popular Xavier García Albiol echó a Dolors Sabaté. Y por si no fuera suficiente, en otros municipios la dificultad radica en que Iniciativa y Podem no han superado los agravios acumulados en estos últimos cuatro años.
