Damià Calvet y Laura Borràs son ya candidatos oficiales a las primarias con las que Junts elegirá a su cabeza de lista y aspirante a presidir la Generalitat en las próximas elecciones. El conseller de Territorio y la líder del grupo en el Congreso han anunciado este miércoles, en la fecha límite para presentar sus candidaturas, que participarán en la carrera por el liderazgo, tal como ambos habían anunciado previamente. Tanto Calvet como Borràs han dejado abierta la puerta a no ser cabezas de lista si finalmente Carles Puigdemont acaba decidiendo ocupar ese puesto, una opción que está abierta hasta la media noche de este jueves.
Calvet, titular de la cartera de Territorio, fue el primero en anunciar su candidatura, hace dos días, con un vídeo en el que aparecía sobre las vías de tren que aparecieron en el cartel publicitario del 1-O. Este miércoles ha confirmado su inscripción como candidato mediante un mensaje en su cuenta de Twitter en el que incluía la captura de pantalla con su ficha como aspirante. En su caso, el conseller cuenta con un perfil de gestión que es bien valorado entre los sectores moderados y el mundo empresarial, pese a que Calvet no dudó en dar el paso hacia Junts siguiendo a Puigdemont cuando este rompió el carné del PDeCAT. Se considera además sucesor del exconseller encarcelado Josep Rull, de quien además fue un estrecho colaborador.
La segunda candidata en liza es Laura Borràs, exconsellera de Cultura y que ahora se desempeña como portavoz de Junts en el Congreso. La diputada es, a priori, una de las personas que parten como favoritas en esta carrera gracias a los apoyos que cosecha entre las bases de su formación y unos resultados electorales como cabeza de lista a las generales que mejoraron las expectativas con las que partía Junts per Catalunya, sobre todo en las generales de noviembre de 2019.
Borràs está a la espera de juicio en el Tribunal Supremo, al que llega como aforada, por un presunto caso de corrupción que habría cometido cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes, entre 2013 y 2017. La Fiscalía cree que la hoy diputada fraccionó contratos para adjudicarlos a un amigo, por lo que considera que pudo haber cometido delitos de prevaricación, fraude a la Administración, malversación y falsedad documental. La diputada, que quedó pendiente de juicio después de que el Congreso aceptara el suplicatorio del tribunal, siempre ha asegurado que sufre una persecución política.
Junto a los dos anteriores candidatos, los únicos que por el momento han dado el paso de presentarse, en la formación de Junts están pendientes de que a lo largo del día puedan llegar nuevos corredores a la carrera por las primarias, que se decidirá en una votación del conjunto de los cerca de 5.000 asociados del partido entre los días 28 y 29 de noviembre. Entre los nombres que habían sonado como posibles candidatos están el de dos consellers: Jordi Puignerò, de Políticas Digitales, quien se considera cercano y bien considerado por Carles Puigdemont, y el de Empresa, Ramon Tremosa, un político que ha ganado ascendente interno desde su llegada a la conselleria hace poco más de dos meses.