La abogada de Roger Español, el votante del 1-O que perdió la visión de un ojo por el disparo de una bala de goma, ha negado que exista informe alguno que le atribuya “agresiones directas” a agentes de la Policía Nacional en el juzgado que investiga las cargas, tal y como ha afirmado este martes en el juicio del procés el comisario jefe de la Brigada de Información de la Policía Nacional en Catalunya.
Anaïs Franquesa, abogada del centro de derechos humanos Iridia, que presentó la querella de Roger Español contra los antidisturbios, ha desmentido así la afirmación del en el juicio del “procés” del mando policial, que en su declaración testifical ha desvelado que ha aportado al juzgado un informe en el que se detallan “cinco agresiones directas” de Español a agentes del 1-O.
“Este informe es inexistente, no hay noticia de agresión concreta de Roger Español a agentes”, ha respondido Franquesa, que ha considerado “extremadamente alarmante” que el comisario haya hecho referencia en su declaración a “un informe inexistente”, en la causa del Juzgado de instrucción número 7 de Barcelona que investiga las cargas del 1-O en la capital catalana.
Además, según Franquesa, cuando el pasado mes de febrero Español declaró ante el juez instructor –imputado por un delito de atentado a la autoridad por lanzar una valla a la Policía antes de recibir el impacto de la bala de gama–, “no se le consignó ninguna pregunta por agresiones directas” a los policías ni consta que dejara herido a ningún agente.
Concretamente, el jefe de la Brigada de Información ha detallado este martes que ha constatado cinco agresiones perpetradas por Roger Español, que consistieron en “un lanzamiento de una valla metálica, otra patada por detrás a un funcionario, un empujón a un policía... Las he visto, son cinco”, ha agregado.
Español, que concurre a las elecciones generales en la lista Front República, que lidera el ex secretario general de Podem en Cataluña Albano Dante Fachín, reconoció en su declaración ante el juez instructor que lanzó un valla metálica contra los policías pero no para lesionar a nadie, sino para “obstaculizar” su paso con el fin de impedir que prosiguieran con las cargas.