El expresidente Zapatero declinó la invitación de Junqueras para que le visitase en la cárcel
El líder de ERC, Oriol Junqueras, hizo llegar al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero una propuesta para que acudiera a reunirse con él en la prisión de Lledoners. El exlíder del PSOE recibió el mensaje a través de dos intermediarios que le trasladaron que el exvicepresidente de la Generalitat tenía interés en intercambiar puntos de vista sobre la situación política. Pero Zapatero optó por no aceptar la petición.
Fuentes conocedoras de las conversaciones explican que la petición para mantener una reunión en la cárcel le llegó a Zapatero a través de dos personas diferentes del círculo de Junqueras. Pero el expresidente español decidió declinar la invitación al considerar que podía entorpecer la estrategia del PSOE y el Gobierno de Pedro Sánchez.
Desde el entorno del exvicepresident aseguran desconocer que se hubiera producido una invitación formal pero recuerdan que Junqueras siempre ha manifestado interés en ver al máximo número posible de actores políticos. Fuentes de ERC señalan que siempre han “invitado” a quien quiera hablar con Junqueras y que no hay un interés específico por verse con Zapatero sino que su disposición es a reunirse a cualquiera que lo estime oportuno.
Junqueras es uno de los presos independentistas que más visitas recibe en la cárcel. Desde su confinamiento preventivo en noviembre de 2017, el jefe republicano ha recibido en Lledoners a políticos de diversos partidos, representantes sindicales y de la patronal, e incluso a cargos religiosos. Según explican fuentes de su entorno, el presidente de ERC mantiene una agenda política activa desde la prisión, tanto recibiendo a personas que desean verle como proponiendo también visitas que le interesan.
Pese al rechazo de Zapatero a acudir a Lledoners para no interferir en la estrategia socialista, el expresidente sí se ha pronunciado públicamente sobre la situación de los dirigentes independentistas encausados. Zapatero declaró en una entrevista publicada en El Mundo en diciembre que no consideraba que estos políticos fuesen “golpistas”, y animó a Sánchez a continuar por la vía del diálogo, considerando que el PSOE debía poder hablar tanto con los independentistas como con la derecha.
Zapatero no ha sido el único dirigente socialista a quien el líder de ERC ha llamado. El expresident de la Generalitat, José Montilla, también fue contactado por el entorno de Junqueras, pero a diferencia de Zapatero, el ahora senador del PSC accedió a acudir a la prisión. Como él, otros destacados socialistas catalanes han acudido a Lledoners en los últimos meses. Entre ellos los alcaldes de Cornellà de Llobregat, Antoni Balmón, y de Sant Joan Despí, Antoni Poveda, o el diputado del mismo partido en el Parlament, Carles Castillo.
La alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, Núria Parlon, visitó al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, también encarcelado en Lledoners, mientras que el jefe de filas del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, se reunió con el exconcejal y exconseller de Interior, Quim Forn, cuando este cumplía prisión en Estremera.
El propio Miquel Iceta, actual líder del PSC y uno de los socialistas que marca la estrategia de Sánchez sobre Catalunya, ha declarado que acudiría a ver a los diputados presos si su gesto no fuera interpretado de forma maliciosa o utilizado para defender objetivos en los que no cree.