La crisis que vive ERC, y las dos maneras de enfocarla, han chocado esta mañana en las dos principales radios catalanas prácticamente a la misma hora. Mientras la secretaria general del partido, Marta Rovira, defendía en los micrófonos de Catalunya Ràdio el manifiesto que ha impulsado un sector del partido para renovar la cúpula, el presidente de la formación, Oriol Junqueras, pedía discreción en una entrevista en Rac1: “Los trapos sucios se lavan en casa”, ha afirmado.
Si bien ha negado haberlo impulsado, Rovira ha explicado que “suscribe” el manifiesto que ya han firmado unos 700 militantes en apenas dos días (incluido el president de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès y la mayoría de consellers y cargos relevantes) que pide una “renovación general de la cúpula dirigente”. “Lo suscribo, pueden poner mi nombre”, ha añadido la secretaria general del partido sobre el texto.
Rovira ha insistido en que los malos resultados de ERC en las últimas convocatorias electorales —desde las municipales hasta las europeas, pasando por las autonómicas— justifican la necesidad de renovar el liderazgo. “El manifiesto intenta que se trate mejor la base, sobre todo a los cargos municipales; y una renovación política. ¿Qué menos después de cuatro elecciones perdiendo resultados?”, ha señalado.
La secretaria general, con todo, no ha querido precisar si apoya que Junqueras continúe al frente de la formación. “Él tendrá que defender su candidatura, no yo porque no me toca”, ha afirmado.
Junqueras, al cabo de pocos minutos, era entrevistado en Rac1 por primera vez desde que se hizo público el manifiesto de una parte de ERC. El que fuese vicepresident de la Generalitat ha afirmado que “comparte muchas de las cosas que se dicen” en el documento y, ante las preguntas de si se ha sentido interpelado, ha respondido que “así lo han interpretado los medios” y por tanto “es posible” que “al menos en parte” el documento se dirija a él, que ha anunciado su voluntad de seguir liderando la formación.
Tanto Junqueras como Rovira, sin embargo, han intentado quitarle importancia a las diferencias que se atribuyen a los dos principales líderes de ERC. La secretaria general ha asegurado que la única “discrepancia” entre ambos es que cada uno tiene una opinión distinta sobre su papel como militante dentro de la organización. Junqueras, por su parte, ha dicho que Rovira es “su amiga” y que “la quiere mucho”.