La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha participado este sábado en una concentración independentista prohibida por el Departament de Interior de la Generalitat. La segunda autoridad de Catalunya se ha juntado con centenares de personas que han cortado la avenida Meridiana, en una nueva jornada de esta protesta que se realiza a diario desde octubre de 2019 y a la que el Ejecutivo de Pere Aragonès ha retirado el permiso por las molestias que causa a los vecinos.
Convocados por Meridiana Resisteix, la organización que diariamente se manifiesta en este eje viario barcelonés, los concentrados han ocupado la carretera puntualmente a las 20.00 horas y han impedido la circulación de vehículos. Se han escuchado cánticos a favor de la independencia, de la “libertad” y pidiendo la dimisión del presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, y el diputado de Junts Francesc de Dalmasses también han acudido a la concentración.
El acto se ha hecho a pesar de la fuerte presencia policial. De hecho, ha habido momentos de tensión entre los agentes de los Mossos d'Esquadra y algunos manifestantes cuando se les ha pedido que abandonaran el lugar. También ha habido empujones, según informa la agencia ACN.
Los cortes de la Meridiana empezaron en octubre de 2019 como respuesta a la sentencia del Tribunal Supremo sobre el 1-O y desde entonces han evolucionado: empezaron siendo unas concentraciones numerosas y, con el paso de los días, ahora juntaban a pocas decenas de personas.
La protesta ha logrado cortar a diario una de las principales vías de acceso a la ciudad y, tras cientos de días celebrándose, había generado quejas de los vecinos y de ciudadanos por sus afectaciones en el tráfico y en el transporte público.
El líder de Ciudadanos en Catalunya, Carlos Carrizosa, ha pedido la dimisión de Borràs. “Los cargos públicos que se saltan la ley están inhabilitados para exigir a los ciudadanos cumplirla”, ha señalado en su cuenta de Twitter.
Desde el PP, la diputada Lorena Roldán también ha exigido la dimisión de Borràs y ha atribuido su presencia en el acto a la polémica por la retirada del escaño al ya exdiputado de la CUP Pau Juvillà. “Necesita redimirse ante los suyos”, ha valorado la popular.
Desde el grupo socialista, el secretario general de Units per Avançar, Ramon Espadaler, ha criticado el “triste ejercicio de populismo” de Borràs y ha lamentado que obedezca a la Junta Electoral Central “con la gesticulación de todos conocida” para acatar la retirada del escaño a Juvillà “pero no al Departamento de Interior ni el conseller [de Interior] Elena”.
También el diputado Pol Gibert, del PSC, ha protestado por lo que ha considerado “irresponsabilidad” y “degradación institucional” de la dirigente de Junts. En Twitter, ha dicho que Borràs está “desobedeciendo” a los Mossos y al Govern pero “después querrá que los ciudadanos respeten las leyes que salgan del Parlament”. “Qué pena”, ha remachado.