Fèlix Millet y el extesorero de Convergència entran en prisión para cumplir condena por el caso Palau
El expresidente y saqueador del Palau de la Música, Fèlix Millet, y el extesorero de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) Daniel Osàcar han ingresado este jueves por la tarde en la prisión de Brians 2 de Sant Esteve Sesrovires (Barcelona) para cumplir las penas de nueve años y ocho meses y tres años y medio de prisión a la que fueron condenados por el expolio y las comisiones ilegales que cobró el partido a través del auditorio.
Millet y Osàcar se suman así al número dos del Palau, Jordi Montull, que entró en la cárcel este lunes. El extesorero de Convergència ha ingresado en prisión acompañado únicamente por su abogado, el penalista Xavier Melero. Ningún antiguo cargo de CDC ha arropado a Osàcar hasta la puerta de Brians 2. Por su lado, Millet ha entrado en la cárcel en ambulancia debido a su invalidez –solo puede moverse en silla de ruedas.
La Audiencia de Barcelona había dado a los tres condenados hasta este jueves para ingresar voluntariamente en prisión. Millet y Osàcar han intentado hasta el último momento frenar su entrada en la cárcel, incluso con una petición de indulto debido a su deteriorado estado de salud, pero los magistrados rechazaron sus pretensiones.
Millet y Osàcar han quedado ingresado en la enfermería de la cárcel por decisión de los servicios médicos del centro, a la espera de un primer control de temperatura y de que los funcionarios verifiquen su identidad y les registren. Al permanecer las prisiones con su propio plan de desescalada por la pandemia, Millet y Osàcar estarán una semana en cuarentena en la enfermería.
Casi once años después de que estallara, la causa del expolio y las comisiones que ilegales que cobró Convergència de Ferrovial a través del Palau está más cerca de terminar. Falta que los condenados terminen de devolver lo que robaron: a día de hoy el auditorio solo ha recuperado el 20% de los 23 millones que Millet y Montull saquearon, 6,6 de los cuales son comisiones que Ferrovial pagó a CDC a cambio de obra pública. Para recuperar el dinero, los condenados y Convergència –ya en fase de liquidación judicial– tienen su patrimonio embargado.
Si bien su delicado estado de salud y su avanzada edad –Millet y Osàcar tienen 84 años y Montull 77– abren la puerta a un traslado al módulo o al hospital penitenciario de Terrassa, la entrada en prisión de los tres principales condenados en el caso Palau tiene un indudable valor simbólico. El mayor caso de corrupción de la historia reciente de Catalunya, protagonizado por un exponente de la alta burguesía catalana y el partido en el poder durante 23 años, no ha quedado impune.
Tras una instrucción judicial muy lenta, de casi siete años, el enjuiciamiento de un caso complejo por parte de la Audiencia de Barcelona y la confirmación de las condenas se ha desarrollado en menos tres años. El Tribunal Supremo ratificó la sentencia que condenó a 9 años y 8 meses y 7 años y 6 meses de prisión a Millet y a Montull y a tres años y medio de cárcel a Osàcar por un reguero de delitos de corrupción. Millet y Montull fueron condenados por malversación, apropiación indebida, falsedad contable, tráfico de influencias, blanqueo de capitales y delito contra la Hacienda pública, mientras que Osàcar lo fue por blanqueo de capitales, falsedad en documento mercantil y falsedad contable.
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