El vicepresident y conseller de Economía, Oriol Junqueras, ha presentado este martes unos presupuestos a los que ha calificado de “los más sociales de la historia”. Lo cierto es que las partidas consideradas sociales, es decir, Sanidad, Educación, Asuntos sociales, Vivienda y Transportes, contarán con un aumento del 5,3%, muy similar al conjunto de las partidas. Sin embargo, los dos mayores departamentos en política social, sanidad y educación, verán incrementados sus presupuestos por debajo de la media, en un 3,8 y un 4,8% respectivamente.
Según las cuentas de Junqueras, el Departament de Salut dispondrá de 316,7 millones más que en 2015, un aumento del 3,8%. Esto quiere decir que, por cada 4 euros más de los que dispondrá la Generalitat, uno irá destinado a sanidad. Por su parte, Ensenyament se llevará 211,2 millones más, es decir, una subida del 4,8% respecto al 2015 que comienza a situarse cerca de la media del incremento.
Según ha explicado el conseller, que las partidas de sanidad y educación aumenten por debajo de la media tiene que ver con que son las más grandes, lo que hace que ligeros aumentos repercutan mucho en el total. Aún así, Junqueras ha detallado que el aumento para Salud representa el 26,2% del incremento, mientras que el de Ensenyament representa el 17,5% de la crecida.
El aumento en gasto social se ve incrementado por otras partidas, que aumentan por encima de la media. Son las destinadas al departamento de Gobernación, Administraciones Públicas y Vivienda, y al de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, además de una partida de Transporte Público que las cuentas cifran en un aumento del 93,5 millones. El primero de ellos, dirigido por Meritxell Borràs y encargado de aplicar la política en vivienda de la Generalitat, verá aumentado su presupuesto en el 9,6%, con 37,5 millones de euros más. El segundo, de la consellera Dolors Bassa, crecerá un 8,4%, que serán 173,4 millones.
En total, los departamentos considerados sociales dispondrán de 874,3 millones más este año, mientras el conjunto del gasto en departamentos aumentará en 1.113,4 millones, llegando a los 22.155,8 en total. El aumento en política social es, por tanto, mucho mayor a los contemplados en el plan de choque pactado con la CUP, que quedaban en 285 millones en total. Este plan de choque, que se convirtió en uno de los puntos fundamentales de la negociación de investidura entre Junts pel Sí y la CUP, está también contemplado en las cuentas contempladas.
La deuda de la Generalitat aumentará este año, aunque no tanto como en los pasados ejercicios. En concreto, lo hará el 6% hasta los 76.600 millones de euros, lo cual supone que crecerá la mitad que el año pasado. De esa cantidad, 48.000 millones de euros están en manos del Estado.
Mejora de los ingresos
En el terreno de los ingresos, las cuentas para 2016, reciben un balón de oxígeno con el incremento de 1.407 millones correspondientes a la liquidación del año 2014 del modelo de financiación. Asimismo, la recaudación de los impuestos cedidos y los propios aumenta en 525,8 millones. “Cuesta mucho hacer crecer los ingresos que dependen de la Generalitat”, ha reconocido Junqueras. El otro empujón al ligero aumento del gasto social proviene de la reducción de intereses de deuda, que descienden en 850 millones.
Por otro lado, Junqueras ha lamentado el retraso en la renovación del modelo de financiación, que debería haber entrado en vigor en 2014, así como el freno del Constitucional a los impuestos aprobados por el Parlament: según los cálculos del Govern, el Constitucional ha impedido recaudar 856 millones con la anulación de tres impuestos, mientras que tiene otros 30 suspendidos, los que se podrían recaudar con el impuesto a las operadoras de Internet y sobre los pisos vacíos.