El primer mensaje institucional de fin de año de Carles Puigdemont ha servido para que el president de la Generalitat se reafirme en su objetivo de celebrar un referéndum de autodeterminación el próximo año, ya sea con permiso del Estado o desde las instituciones catalanas. Una palabras que llegan pocas horas después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, haya reiterado su negativa a pactar un referéndum y haya considerado que una eventual reforma de la Constitución “no va a resolver nada” respecto a la situación catalana.
Si hace una semana el propio Puigdemont abogaba por agotar la vía del referéndum acordado con el Estado para atraer al sector de los 'comuns', este viernes ha vuelto a avisar de que en 2017 los catalanes “decidirán su futuro en un referéndum legal y vinculante”. De esta forma, el president desoye a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que pidió tras la cumbre de la semana pasada “no poner fechas” a la consulta.
Las palabras de Puigdemont no son un giro en la posición del Govern, sino la reiteración de lo que el president lleva repitiendo desde la cuestión de confianza. Sintetizado en la fórmula “o referéndum o referéndum”, la Generalitat quiere lograr la autodeterminación de Catalunya haya acuerdo o no con el Estado.
En su mensaje institucional, Puigdemont ha considerado que el referéndum será “legal” porque se convocará “de acuerdo con el mandato de las leyes” (aunque no ha concretado cuáles) y que tendrá carácter “vinculante” ya que el Govern y el Parlament “tendrán que aplicar su resultado sin dilaciones ni excusas”.
A 600 kilómetros de distancia, Rajoy tampoco se ha movido de su posición durante su tradicional rueda de prensa de fin de año. El líder del Ejecutivo central ha pedido a Puigdemont que abandone tanto el objetivo de la independencia como el del referéndum y que se avenga a “hablar de lo que interesa a la gente”, esto es, de todos los temas salvo de la independencia y la autodeterminación.
Precisamente Puigdemont ha reiterado que estas son dos de las carpetas que sí le gustaría tratar con Rajoy. “Continuaremos teniendo la mano tendida siempre, pero desde el compromiso y la fidelidad a nuestros principios”, ha aseverado el president, horas después de que Rajoy le conminara a detener un plan que “no va a ninguna parte”.
Después de la rueda de prensa de Rajoy y del mensaje de Puigdemont, ambos ejecutivos siguen enconados en sus posturas. Aunque persisten las dudas sobre si Puigdemont será capaz de conseguir un referéndum de autodeterminación legal, vinculante y, en especial, efectivo, las palabras de ambos presidentes sí permiten extraer una conclusión: las fechas navideñas no han ayudado al éxito de la 'operación diálogo'.